Mataró vuelve a llevar a Antifraude el sobrecoste de un edificio público y demanda las adjudicatarias

El Ayuntamiento de Mataró volverá a llevar a la Oficina Antifraude las presuntas irregularidades en la licitación, construcción y comercialización del edificio del Rengle, que se hizo entre los años 2007 y 2011. La obra, promovida por la empresa pública PUMSA, terminó costando 26,3 MEUR, 8,2 MEUR más de lo previsto inicialmente. Según las conclusiones de la comisión municipal dedicada a analizar qué pasó, habría 1,7 MEUR de la obra que no se justificaron y que la dirección de la obra, sin embargo, autorizó.

El Ayuntamiento llevará estas conclusiones a Antifraude pese al caso de los sobrecostes del Rengle ya fueron investigados y archivados por Fiscalía el año 2016. También se presentará una demanda judicial contra las empresas adjudicatarias, tanto contra GPO, encargada de la dirección de la obra, como contra FCC, empresa constructora, para reclamar el reembolso de los gastos injustificados.

El edificio de oficinas y comercial del Rengle se presupuestó por 18,1 MEUR, pero el coste final ascendió hasta 26,3 MEUR, un 42% más. Además, el proyecto sufrió múltiples obstáculos que han acabado provocando un endeudamiento municipal que, si no hay ningún otro cambio, se acabará de pagar el próximo año.

El caso llegó a la Oficina Antifraude en 2012 y, después de más de dos años de investigación, se elevó a la Fiscalía en detectarse diversas irregularidades en la contratación y ejecución de la obra. La investigación del fiscal, sin embargo, terminó resolviendo que no hubo ninguna actuación delictiva en el caso del Rengle.

Sin embargo, el Ayuntamiento no ha dejado de intentar esclarecer qué pasó y durante el último año una comisión municipal ha hecho un nuevo análisis, que resuelve que la gestión del proyecto no fue suficientemente precisa y rigurosa y estuvo plagada de errores. Aunque no han podido demostrar nada algunos partidos aseguran que se mantienen muchas sospechas.

El presidente de la comisión y portavoz del PP, José Manuel López, recuerda que el inicio de obra y su inauguración "son coincidentes con períodos electorales" y resalta que los problemas llegaron con el cambio de la empresa encargada de la dirección de la obra, cuando se empezaron a pagar facturas sin justificar.

Aparte de haber acordado volver a llevar el caso ante Antifraude, la comisión se ha comprometido a trabajar para "mejorar e incrementar los mecanismos de control y de fiscalización internos del Ayuntamiento y de las empresas municipales" para una situación como ésta no se repita. En paralelo, el Ayuntamiento ha sacado adelante una demanda contra GPO y FCC para reclamar los 1,7 MEUR de facturas sin justificar.

Tirón de orejas por El Sorrall

El pleno del Ayuntamiento de Mataró también ha aprobado los conclusiones de otra comisión de investigación sobre la gestión de la concesión del Sorrall, otro de los históricos asuntos urbanísticos de la ciudad. Esta zona deportiva del barrio de Cerdanyola se adjudicó en 1999 por más metros cuadrados de los que tenía el consistorio en propiedad, con el compromiso de que los metros restantes se adquirirían y se cederían más adelante.

Esto, sin embargo, no pasó nunca y la empresa terminó reclamando al consistorio, alegando que la limitación de espacio a lo largo de todos estos años los ha acabado suponiendo pérdidas económicas. En 2016 se indemnizó la empresa por valor de 3 millones de euros. La comisión ha lamentado la manera de hacer de los gobiernos anteriores y todos los grupos se han comprometido a acabar con determinadas prácticas propias de los tiempos de la burbuja inmobiliaria.

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