Sintecho pero no solos

La Fundació Arrels edita un mapa de recursos y consejos para personas sin hogar. Dónde dormir, comer, ducharse o buscar trabajo son algunos

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Carme Escales

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En Barcelona, hay 3.600 personas sin hogar, unas mil de las cuales duermen en la calle. Sobrevivir así significa conseguir llevarse algo al estómago cada día y tener que localizar un lugar donde dormir. Para quien no cuenta con un techo bajo el que cobijarse cada noche, asociaciones como Arrels Fundació significan un oxígeno vital. Pero en su local del Raval, tan solo disponen de una quincena de plazas para dormir. Sí tienen duchas, taquillas para custodiar documentos o el equipaje de tantos viajes que se emprendieron hacia Barcelona cargados de esperanzas. Son siempre múltiples las causas que acaban dejando a alguien en la calle, con lo puesto y una mochila o maleta que guarda lo más estimado. Tanto da ahora cómo hayan llegado hasta ahí, “ahora debemos preocuparnos de lo necesitan”, expresa el director de Arrels Fundació, Ferran Busquets. Y para ello acaban de editar una guía de recursos con un mapa en el que se localizan albergues, comedores públicos donde poder desayunar, comer, merendar o cenar; duchas públicas y privadas o consignas. También se indican lugares oficiales donde acudir en caso de ser víctima de violencia de género, necesitar atención médica si no se cuenta con tarjeta sanitaria o si se consumen drogas. “Hemos querido incluir también asistencia jurídica gratuita, recogiendo así las peticiones de la gente sin hogar que, además, se siente amenazada”, puntualiza Busquets.

60 puntos de ayuda

La puerta de Arrels Fundació abre cada día. El pasado año, la entidad contabilizó más de 1300 peticiones de personas a las que desde el Raval solo pudieron derivar a otro lugar. “Que llamen a nuestra puerta y no podamos dar respuesta a todos y a todo nos hizo plantearnos la preparación de la guía con los puntos donde esas personas pueden ir a recibir atención sin el filtro de un trabajador social”, explica el responsable de Incidencias de Arrels, Ramon Noró. “En Arrels siempre hemos priorizado las situaciones más vulnerables, más cronificadas de las personas sintecho, pero en nuestra recepción se atiende a todo el que llega, tratando de aconsejar qué hacer y dónde ir. Y la guía nos permite poner orden a toda la información que ya ofrecíamos, lugares, horarios… es una guía práctica en la que ha sido esencial el asesoramiento de las propias personas que viven o han vivido durante largo tiempo en la calle”, declara la responsable del programa de acogida de Arrels Fundació, Marta Maynou.

Dignificar el revés de la vida

“Todo aquel que entra por nuestra puerta tiene una situación compleja, diversa, pero con un denominador común: el sufrimiento, algo que cuesta mucho de sostener”, dice Maynou. “Al menos, si no podemos dar respuesta a la mayoría de las necesidades, escuchar y reorientar resulta muy dignificante”, añade.

También lo ha sido para los cinco asesores de la Guía práctica con consejos para personas que viven en la calle. “Ha sido terapéutico para ellos, porque a la vez que nos han ayudado a construir una ayuda para quien se encuentre de repente en la misma situación de tener que vivir en la calle, gracias a su aportación han podido transformarse en expertos a través de sus propias historias de sufrimiento y superación de obstáculos”, destaca Marta Maynou.

La guía también incluye lugares donde ir a buscar trabajo, ropa y los puntos de atención de servicios sociales.