"Nadie podrá ayudar a los niños que sufren 'bullying' si se lo callan"

Irina tiene 10 años y le encanta escribir letras de canciones y cantarlas. La música le ayuda a expresarse. Canta cuando está alegre, cuando está triste o cuando está enfadada. Muchas veces lo hace para sacar sentimientos que lleva dentro. Irina, que tiene trastorno del espectro del autismo, es una valiente que ha dicho 'no' al bullying. Ahora con su testimonio quiere ayudar a que muchos más niños y niñas se planten contra el acoso escolar.

-Irina cuéntanos cosas de ti, ¿cuál es tu asignatura favorita?

-Me gustan mucho las clases que tengo y los profesores. Me gusta la plástica, la música, el inglés, las matemáticas, catalán, castellano…. La verdad es que todo.  

-¿Si tuvieras que escoger una?

-¡No puedo! Me gustan todas. Música quizás porque también hago una actividad extraescolar de viola.

-¿Qué te aporta la música?

-La música me ayuda a expresarme, me invento letras e improviso nuevas canciones. Canto cuando estoy alegre, cuando estoy triste, cuando estoy enfadada o simplemente cuando estoy normal. Siempre canto.

-¿Y jugar, a qué te gusta jugar?

-No acostumbro a jugar. No es que no me guste, pero no sé con quién jugar. A veces voy a ver a mi 'ahijada' de infantil para enseñarle a leer. Los niños mayores enseñamos a leer a los más pequeños.

-¿Has vivido situaciones difíciles en la escuela? ¿Has sentido que no te trataban bien?

-Cuando llegué a la escuela nueva me hacían 'bullying'. Me decían rarita, tonta, decían que yo hacía cosas malas, y estos niños les decían a otros que no jugasen conmigo, menos una niña que me ayudó y vino a jugar conmigo. Fue la primera. También en la escuela anterior había vívido algo similar, pero no era consciente de ello.

-¿Qué pasaba en el otro cole?

-En el otro colegio nadie jugaba conmigo, solo una niña algunas veces, pero luego decía cosas malas sobre mí a mis espaldas. No tenía amigos, no sabía con quién jugar ni qué hacer durante la hora del recreo. Me echaban de los grupos y yo solo tenía 6 años.

"Me decían rarita, tontita, que hacía cosas malas. Les decían a otros que no jugaran conmigo"

Irina

— 10 años. Víctima de 'bullying'

-¿Cómo te sentías cuando te hacían eso?

-Muy mal. Me sentía como si no existiera.

-Cuando te diste cuenta que esto no estaba bien, ¿qué hiciste?

-Se lo conté a mi profesora. Ella decía que lo dejara pasar, que no jugase con ellos, pero a mí esto me enfadaba mucho y mi madre me enseñó que justamente era porque me enfadaba que ellos me lo hacían más y que si no me enfadaba me dejarían tranquila.

-¿Fue así?

-Bueno…

-¿Cómo lo superaste?

-Con ayuda del psicólogo, con ayuda de mi madre, mi padre y mi hermano y muchas otras ayudas.

-¿Ha mejorado la situación en el cole?

-Depende de los días.

-¿A la hora del recreo con quién juegas ahora?

-Con cinco amigas.

-¿Tú sabías lo que era el 'bullying'?

-Nos lo contaron el trimestre pasado. Nos dijeron que el 'bullying' son tres cosas: que se repite muchas veces, que hay un desnivel de poder y que existe la intención de hacer daño a otro. Y luego entendí que lo que me hacían mis compañeros era eso.

-¿Por qué crees que hay niños y niñas que hacen eso?

-No lo sé, la verdad.

-¿Qué dirías a los niños y niñas que ahora mismo estan sufriendo acoso escolar?

-Que no se lo callen porque si no nadie podrá ayudarles. También les diría que yo lo he sufrido y que les entiendo y que espero que se mejoren y vuelvan a estar contentos.

¿Cómo estás tú ahora?

Ahora tengo amigos, me saludan por la calle. Y celebro el cumpleaños con algunas amigas de extraescolares. Pero aún tengo un poco de miedo cuando llega la hora del recreo.

¿Por qué?

Por muchas cosas, pero sobre todo porque sufro por mi hermano porque ha tenido algunos ataques de ansiedad y yo lo he vivido y he sufrido mucho y he pasado miedo, tristeza, enfado. Cuando estoy en la escuela tengo miedo que le vuelva a ocurrir. Hice una letra de una canción para decirle a mi hermano todo lo que siento. Esto me ayudó, pero los compañeros de clase se burlaban. Yo les decía que parasen porque me hacían sentir muy mal, pero ellos no lo entendían en absoluto.

¿Qué les pedirías a tus compañeros?

Que fuesen amigos míos y que jugasen conmigo y que entendiesen y no se burlasen de la situación de mi hermano.