Todos quieren a Lucas Hedges

No debe ser fácil decidir el siguiente paso en tu carrera después de rodar, una detrás de otra, tres películas nominadas al Oscar, y ser tú mismo nominado por una de ellas. En esa deliciosa encrucijada se vio Lucas Hedges tras pasar por 'Manchester frente al mar', en la que hacía de sobrino contestón de Casey Affleck, papel que le valió una nominación al Oscar al mejor actor secundario, y, después, otro par más de clásicos recientes como 'Lady Bird' y 'Tres anuncios en las afueras'.

El 2018 iba a ser un año clave para Hedges y lo ha sido, aunque todavía no hayan empezado a caerle las nominaciones por sus trabajos, que llegarán. Llegado diciembre, es tiempo de recapitular, y más de uno se sentirá afligido comparando su año con el de este actor de 22 primaveras. Hedges rodó una película con Julia Roberts ('El regreso de Ben'), otra con Nicole Kidman ('Boy erased'), una tercera a las órdenes del actor de culto Jonah Hill ('Mid90s')… Y, por si esto fuera poco, ha debutado en Broadway con un revival de la obra 'The Waverly gallery' de Kenneth Lonergan, su director en 'Manchester frente al mar'.

'El regreso de Ben' será lo primero que veremos por aquí: se estrena el próximo viernes, día 7. En ella, Lucas Hedges interpreta a un joven adicto a la heroína, en apariencia ya por el buen camino, que sorprende a su madre (Roberts) volviendo a casa por Navidad. No todos están contentos con ello: su hermana mayor (Kathryn Newton, de 'Big little lies'), por ejemplo, no acaba de creer que se esté quitando. Habrá tensiones.

Hedges dudó en aceptar el papel, esencialmente porque el director y guionista es su padre, Peter Hedges, el mismo que lo sacó por primera vez en una película; como extra en 'Como la vida misma'. No quería que lo viesen como un enchufado. Pero el guion era, en apariencia, demasiado bueno como para dejarlo pasar.

En 'Boy erased' ha sido dirigido por Joel Edgerton, actor australiano que debutó como cineasta con la notable 'El regalo'. Esto no es un 'thriller', como aquella, pero al parecer tiene la misma tensión y se sufre a conciencia. Hedges interpreta a un adolescente gay al que sus padres ponen un ultimátum: o pasa por una terapia de reorientación sexual o sale de la familia. El padre (Russell Crowe) es predicador baptista y no puede aceptar a un hijo gay. La madre (Nicole Kidman) podría, quizá, llegar a quererle como es, pero igualmente no duda en llevarle al siniestro centro Love In Action.

La mejor forma de sobrevivir a esa terapia, le dice al pobre Jared uno de sus compañeros, es disimular hasta salir de allí. Como ha explicado el crítico de cine David Edelstein en la revista 'New York', el trabajo de Hedges es difícil: "Retratar a un adolescente cuya mejor opción es no revelar nada de sí mismo". Al parecer, lo hace con suma inteligencia. En España podremos comprobarlo a partir del 1 de febrero, cuando llegará a los cines esta película con potencial para muchas nominaciones al Oscar.

Anderson y Gilliam

Hedges sabe perfilar la incertidumbre con increíble convicción, como demostró en 'Lady Bird', pero no se quiere mucho como actor. De hecho, se cree la peor parte de todas las películas en que ha salido, aunque ya llamara la atención de muy joven en 'Moonrise kingdom' (como 'boy scout' malo) o 'Teorema zero' (como el programador Bob, hijo del personaje de Matt Damon).

No, no está mal empezar tu carrera con directores como Wes Anderson y Terry Gilliam. Pese a su pésima opinión sobre él mismo, todos quieren un pedazo de Lucas. "Es encantador, divertido, inteligente, emocional y versátil", ha dicho Kenneth Lonergan. "¿Quién no querría trabajar con él?".

Próximamente lo vamos a ver en proyectos harto intrigantes. Por un lado, participa en 'Waves', inesperado musical del director de la terrorífica 'Llega de noche'. Y después está algo como 'Honey boy', escrita por Shia LaBeouf a partir de sus propias experiencias como joven prodigio actoral con padre alcohólico. Lucas Hedges hará de Shia LaBeouf. Éste hará del padre. Habrá que verlo.