'CELEBRITY' RESISTENTE

El Koala: el héroe agropop

El cantante ha logrado que su estilo rústico brille en el 'corrá' de 'Gran Hermano Vip'

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Ramón de España

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A base de no hacerse notar demasiado (aunque le cueste) y de mostrar un talante conciliador en un entorno propenso a la histeria, El Koala avanza, lento pero seguro, hacia el triunfo en 'Gran Hermano Vip' (por lo menos hasta ahora: igual se lo acaban cepillando la próxima semana, pues la vida transcurre a una velocidad vertiginosa en Tele 5)

El Koala, que en realidad atiende por Manuel Jesús Rodríguez Rodríguez (Rincón de la Victoria, Málaga, 1969), saltó a la fama en el 2006 con su exitazo –estuvo entre los 30 más vistos en Youtube– 'Opá yo vi hazé un corrá', que marcaba un punto de inflexión en la historia del agropop español. Había precedentes, cierto, desde los muy deficientes Zapato Veloz –los de 'Tengo un tractor amarillo', que debería ser un himno 'indepe' en la Catalunya profunda– a los muy divertidos No Me Pises Que Llevo Chanclas, pasando por Tomeu Penya (ya sé que él cree hacer country balear, pero lo suyo es puro agropop, créanme), pero el tono a lo Status Quo y la desfachatez de su autor hacían de 'Opá yo vi hazé un corrá' algo realmente singular. Fue entonces cuando descubrimos que lo de El Koala era un apodo que le habían puesto en la obra por su agilidad a la hora de encaramarse al andamio, ya que no siempre había podido vivir del agropop, aunque él prefiera denominar a lo suyo rock rústico.

Del punk a la rumbita

Manuel Jesús Rodríguez Rodríguez formó su primer grupo en 1986, la banda punk Santos Putos. En un peculiar giro estilístico, de ahí pasó a la rumbita y el flamenquito con Arte y Duende. Volvió al rock en 1992 con Los Ducati, que hasta llegaron a grabar un disco, aunque les costó unos cuantos años, ya que 'Ostia' no apareció hasta 1999.

El tipo es toda
una presencia,
como esos
actores que
siempre son
ellos mismos,
interpreten lo
que interpreten

En el 2001 se convirtió en El Koala, iniciando una carrera en solitario que desembocó en el disco 'Rock rústico de lomo ancho' (2006), de donde se extrajo la canción que lo haría famoso… Durante unos meses. Insistió al año siguiente con 'Vuelve la burra al trigo', que incluía una voluntariosa versión del 'Mi carro' de Manolo Escobar a medias con el propio Manolo Escobar. Si esperaba repetir el éxito de 'Opa yo ví hazé un corrá', nuestro hombre se quedó con las ganas, tal vez porque 'Mi carro' se la sabía todo el mundo de memoria y la versión no aportaba muchas novedades al original.

‘One hit wonder’

El Koala no tardó mucho en convertirse en eso que los anglosajones definen como 'one hit wonder'; o sea, los músicos que han pegado un pelotazo con un tema y luego no se ha vuelto a saber gran cosa de ellos. Una lástima, ya que 'Zoy arbañí' tenía madera de éxito, aunque tal vez se parecía demasiado a lo del 'corrá'. Fue así cómo, gracias a su persistencia, El Koala se fue convirtiendo en un personaje pintoresco que a la fuerza tenía que acabar siendo descubierto y explotado por Tele 5. Y es que no me negarán que el tipo es toda una presencia, como esos actores que siempre son ellos mismos, sin importar el papel que interpreten.

A diferencia de Pepe Begines, el cantante de No Me Pises Que Llevo Chanclas, el Koala no puede pasar por un señorito universitario y solo es capaz de presentarse como lo que es: un gañán de tomo y lomo cuyo físico resulta tremendamente adecuado para su música, esa mezcla de rock, punk, flamenco y cantares de ciego (de vino) que, en el lejano 2006, marcó un antes y un después en la historia del agropop nacional. O del rock rústico, como él prefiere denominarlo. No sé si ganará la última edición de 'Gran Hermano Vip', pero se lo merece y mi corazón está con él: su tronío rural brilla con luz propia en ese gallinero infame.