INNOVACIÓN

Un robot que sabe implantar el cabello

Opera en HTI Clinic, centro médico para resolver la alopecia, que afecta al 80% de los hombres

El Dr. Artur Díaz Carandell, de HTI Clinic, junto al primer robot que implanta cabello en Catalunya.

El Dr. Artur Díaz Carandell, de HTI Clinic, junto al primer robot que implanta cabello en Catalunya. / .45017595

Carme Escales

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Evitar que las frenéticas vidas que llevamos hagan caérsele el pelo a cualquiera es misión imposible. El último foro europeo de dermatología apuntaba una prevalencia del 80% de alopecia en hombres caucásicos (blanco-indoeuropeo) y algo superior al 40% en mujeres, al alcanzar los 70 años. El estrés es una afilada máquina de afeitar cabezas, abre entradas y claros en coronillas, ya en la adolescencia.

Los especialistas en implantes capilares se frotan las manos ante un nuevo mercado donde la innovación tecnológica tiene también su papel a jugar. Frederic Moll, la persona que fundó Intuitive Surgical, la compañía que desarrolló el sistema robótico Da Vinci, que simplifica la cirugía mínimamente invasiva, es también el artífice de Restauration Robotics, una empresa nacida a inicios de este siglo para diseñar el primer robot del mundo –y por el momento único como asistente autónomo, no como parte instrumental solo– que acompaña a los especialistas de la medicina en el implante capilar. Artas es el robot que complementa la intervención del diagnóstico y supervisión médica aportando la precisión, simetría e invariabilidad en el implante como ningún ojo humano puede garantizar durante todas las horas que puede llegar a durar una operación de reparación de alopecia. «El robot está dotado de inteligencia artificial que identifica las unidades foliculares idóneas de la zona de cabello del paciente, sobre el cuello, estudiando ángulo y profundidad y realiza la extracción automática», detalla Matteo Vernich, director de ventas en Europa, Medio Oriente y África de Restoration Robotics. «El robot también calibra la mejor distribución de pelo en la zona de implantación y señala los puntos donde insertar los folículos», añade.

Con sede en San José (California), Restoration Robotics ha vendido ya unas 250 unidades de este asistente robotizado que cuesta 360.000 euros. Noventa de ellos ya funcionan en EEUU y hay cinco en España. Uno de ellos ha sido adquirido por HTI Clinic (Hair Transplant Institute), un centro médico que acaba de inaugurarse en Barcelona (Riera de Sant Miquel, 40) para dedicarse en exclusiva al implante capilar. «En un mercado en auge como este, hemos querido apostar por la tecnología más punta para alcanzar la más alta precisión y velocidad en las intervenciones que cuentan con un índice de éxito muy alto, sin apenas complicaciones», precisa Artur Díaz Carandell, cirujano maxilofacial cofundador y director médico de HTI Clinic.

Coste

Los precios de los implantes capilares en España oscilan entre los 8.000 y los 12.000 euros con la mediación del robot. El coste de la intervención está en torno a los 5.000 euros si se realiza de manera manual. «Nosotros nunca podremos competir con los precios que ofrecen países como Turquía, por el valor de su moneda, pero sobre todo por el nivel de garantías en las que la rigurosidad sanitaria y laboral nos enmarcan aquí», justifica el cirujano y propietario de la nueva clínica barcelonesa. «Barcelona ya cuenta con una alta reputación en atención y prestigio sanitario, por lo que hacernos con la tecnología de vanguardia le suma valor», añade.

La empresa estadounidense madre del robot Artas salió a bolsa hace un año. Con un centenar de personas en plantilla, el 25% ingenieros que estuvieron antes en multinacionales como Apple Google, la compañía facturó el año pasado 21,3 millones de dólares. No deja de ser una start-up de tecnología, pero su gran valor son las patentes como innovadores que se avanzan a las necesidades en sectores como la medicina o la industria donde aportan precisión e invariabilidad en minuciosas tareas repetitivas.