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Amicable: un divorcio sin traumas, a bajo coste

La aplicación trata de evitar el empleo de abogados, reduce los gastos de la separación y facilita un divorcio amistoso

Pip Wilson y Kate Daly, cofundadoras de la startup Amicable.

Pip Wilson y Kate Daly, cofundadoras de la startup Amicable. / periodico

Begoña Arce

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Cuando un matrimonio se rompe, la experiencia puede ser muy traumática. El proceso lleva a menudo demasiado tiempo, es demasiado caro, y por el camino, la familia corre el peligro de salir maltrecha. Nadie quiere pasar por ese trago, pero en Inglaterra y Gales, el 42% de las bodas acaban en divorcio. Una de ellas fue la de Kate Daly y el proceso le resultó tan penoso, que quedó convencida de que, “hay mejor manera de hacer las cosas”.

Así surgió ‘Amicable’ en el 2015, puesta en marcha por Daly y Pip Wilson en Londres. Una start-up concebida para ayudar a las parejas a sobrellevar en los mejores términos posibles su divorcio, con un coste emocional y económico mínimo. Las dos emprendedoras tienen formaciones muy diferentes. Mientras Daly es doctorada en psicología y experta en divorcios, Wilson está especializada en tecnología. En ese combinado se basa la fórmula que ofrecen a los clientes, para rebajar la animosidad, y la necesidad de abogados.

Lo que empezó siendo una aplicación gratuita es hoy un programa on line con diferentes servicios y varias opciones, para asesorar y cubrir de principio a fin el proceso de divorcio, dependiendo del reparto de los bienes y los acuerdos para los hijos. La tecnología resuelve los trámites administrativos y el papeleo. Cada cual puede seguir en todo momento el progreso de su separación. Al mismo tiempo varios asesores, ‘divorce coaches’, ayudan a los clientes, bien por teléfono o por Skype,en el plano emocional y paralegal.

Amicable se ha fijado como techo el intervenir en 600 divorcios al año. De momento la compañía ha superado los 1000 usuarios de la aplicación, en 52 países, con 300 clientes de pago en Inglaterra y Gales. Todo el proceso, según el servicio digital, “es diez veces más barato que ir al tribunal, sale a un tercio de los costes que supone emplear a un abogado y la mitad del precio de un servicio de mediación”. De acuerdo con Daly una parte de su clientela son parejas ya maduras, de más de sesenta años, con una relación de mucho tiempo, que la hora de divorciarse, sin la responsabilidad ya de los hijos a su cargo, han optado por la vía on line, buscando la ruptura menos dolorosa y conveniente económicamente.   

Daly y Wilsom ofrecen en su portal varios consejos a tener en cuenta. La separación o el divorcio se va a resolver más lentamente, si un miembro de la pareja trata de meter prisa al otro. No se precipite a la hora de acudir a un abogado. Hay que negociar desde el ángulo del conocimiento, no de la emoción. Es conveniente que la pareja cree de mutuo acuerdo un calendario y se atenga a él. Y finalmente, durante el divorcio hay que poner el foco en el futuro, en la vida aparte que comienza, no en el pasado.