CÓMO EMPEZÓ

Huawei: el gigante chino que no se libra de la polémica

Huawei se ha convertido en una potencia mundial en redes y 'smartphones' en poco más de 30 años de historia

Ren Zhengfei, fundador de Huawei.

Ren Zhengfei, fundador de Huawei. / periodico

Josep M. Berengueras

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En la lista de ciudades chinas con mayor población se encuentran urbes turísticas como Shanghái, Pekín, Guangzhou... Y luego está Shenzhen. Esta última de turística tiene poca: en 1980 no tenía ni 60.000 habitantes; hoy, tiene más de 12 millones. ¿El motivo? Fue la primera ciudad del país que recibió la declaración «zona económica especial», lo que la catapultó en la creación de empresas. Una de ellas es todo un símbolo:Huawei.

En los 80, China buscaba la forma de desligarse de la dependencia tecnológica extranjera.Muchas empresas apostaron por las alianzas, mientras que Ren Zhengfei, un exingeniero del instituto de investigación militar del Ejército Chino, decidió apostar por otro camino: tratar de crear su propia tecnología.

Fue en 1987 cuando Ren fundó Huawei en Shenzhen, ciudad en la que hoy en día aún está presente con una ciudad dentro de la ciudad (con sus viviendas y servicios includos, pues da trabajo a decenas de miles de personas en su macrocampus). En 1987 la situación era algo diferente. Con menos de 4.000 dólares Ren comenzó su andadura, apostando por la investigación de equipamiento para telecomunicaciones. Su apuesta por el sector fue clave, y Ren, que ya había sido un destacado inventor en en el Ejército, dio con la tecla buena.

Exterior

La firma comenzó importando aparatos desde Hong Kong mientras estudiaba e investigaba para lanzar su propia tecnología. Fruto de esa investigación, en 1993 logró su primer hito: lanzar su primer intercomunicador de telefonía fija, el más potente que había en el país. China, en pleno desarrollo, lo acogió con los brazos abiertos.

La especialización en redes fue un acierto. Ganó los primeros contratos públicos, también con el ejército, y sobre todo se benefició de la decisión de Pekín en 1996 de promover el uso de tecnología local y restringir el acceso de firmas extranjeras. Huawei comenzó a expandirse al extranjero, lo que al mismo tiempo le fue abriendo las puertas de otros países. Las redes evolucionan, y pese al dominio europeo en este tipo de tecnología, la entrada de un competidor que ofrecía productos similares pero a menor precio dinamitó el mercado y catapultó a la compañía.

Pero Huawei no se conformó con ese mercado. En el 2003 creó la división de terminales y, un año después, ya tenía en el mercado su primer móvil 3G. No paró de sacar móviles, ni tampoco de diversificar la oferta:portátiles, tablets, wearables, accesorios de todo tipo... Y es ya la segunda empresa que más smartphones vende en el mundo.

Huawei es hoy un gigante mundial, aunque no se libra de la polémica:EEUU la acusa de espiar con sus equipos de red, y varios países han decidido dejar de trabajar con esta firma. La empresa niega las acusaciones.