La ciudad se prepara para reactivar su tejido comercial y empresarial

Una vez se supere la crisis sanitaria generada por la covid-19 llegará el momento de hacer frente a otra situación de emergencia: la económica, especialmente para autónomos, pymes y comercios. Para ello, el Ayuntamiento de Barcelona ha puesto en marcha nuevas medidas fiscales para prevenir la crisis económica en la ciudad y atender de manera coordinada las necesidades de lo sectores implicados. Entre ellas, un nuevo fondo –con una dotación inicial de 25 millones de euros–, el impulso de un gran pacto de ciudad y la creación de un nuevo centro de coordinación.

El primer fondo municipal en apoyo al sector económico permitirá establecer ayudas, subvenciones y acciones de promoción que atiendan las necesidades del tejido comercial y empresarial de la ciudad y permitan promover el empleo. Las prioridades son incentivar el consumo local y de proximidad y promocionar la ciudad en el exterior, que se promoverán con distintas campañas municipales en las que ya se está trabajando.

Además, se aplaza la aplicación del impuesto turístico hasta finales de año o hasta el próximo año para rebajar la presión fiscal en uno de los sectores más afectados por la crisis de la covid-19.

Anticipación y coordinación

Para prever las necesidades socioeconómicas que se deriven de la crisis y acelerar la salida de ella, se ha reforzado la coordinación con todos los agentes con dos iniciativas. Por un lado, un gran pacto de ciudad con todos los grupos municipales para consensuar las líneas de actuación y avanzar en la transformación del modelo hacia una economía más verde y digital.

Por el otro, la creación del nuevo Centro de Coordinación de la Respuesta Económica (Cecore), que tiene como grandes objetivos monitorizar la situación económica, establecer previsiones para ajustar las decisiones, definir las acciones, coordinarse con todos los agentes económicos y sociales y establecer alianzas con las administraciones.

Tal y como remarcan desde el consistorio, ya se está trabajando en las primeras acciones, que se concretarán durante las próximas semanas. Estas nuevas medidas fiscales se suman a la modificación del calendario tributario, aprobada para aligerar la carga económica de autónomos y pymes.