en Pinto y Valdemoro

Dos detenidos por robar a ancianos haciéndose pasar por electricistas

Sustrayeron más de 10.000 euros utilizando las cartillas de los ancianos, además de joyas

Guardia Civil

Guardia Civil / EFE

El Periódico / Agencias

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La Guardia Civil han logrado detener a dos personas por su presunta implicación en siete delitos de hurto a personas de avanzada edad en las localidades de Pinto y Valdemoro, tras entrar en las viviendas simulando revisiones de electricidad. 

Los agentes del Área de Investigación del Puerto de Valdemoro iniciaban una investigación tras recibir la denuncia de una de las víctimas que alegaba ante la Guardia Civil que le habían sustraído varias joyas y una cartilla bancaria, todo ello, tras recibir la visita de dos revisores de electricidad en su domicilio. 

De las primeras comprobaciones, los agentes acreditaron la existencia de otras víctimas que narraron a los investigadores la falta de efectos del interior de su domicilio, donde se daba un mismo patrón

'Modus operandi'

Así los afectados recibían una llamada telefónica en su vivienda y se les alertaban de un incremento "desmedido" del consumo eléctrico en su vivienda. Tras concertar una visita en pocos minutos se personaban dos personas y mientras uno de ellos permanecía con el propietario, el otro realizaba las comprobaciones por las habitaciones de la casa aprovechando para sustraer todos los efectos de valor. 

Mediante los datos aportados por los afectados, los agentes realizaron varias comprobaciones que les llevaron a identificar a los presuntos autores, dos varones de nacionalidad marroquí de 22 y 28 años de edad que cuentan con antecedentes por delitos contra el patrimonio, a quienes se les imputa la autoría, hasta el momento de siete hurtos en domicilios en Pinto y Valdemoro

Los ya detenidos han logrado sustraer de las cuentas corrientes de los ancianos 10.000 euros utilizando las cartillas bancarias sustraídas, además de numerosos joyas con un alto valor sentimental.

Las víctimas son personas con edades comprendidas entre los 71 y los 87 años, que en el momento de su detención se encontraban solos en la vivienda.