SORTEO EXTRAORDINARIO DE LOTERÍA DE NAVIDAD

Historia de la Lotería de Navidad

El primer sorteo extraordinario de Navidad en España se celebró en 1812

Los bombos de la Lotería de Navidad

Los bombos de la Lotería de Navidad / lf

Manuela Valdés

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

La historia de la Lotería de Navidad se remonta a 1812. Durante el reinado de Carlos III, el marqués de Esquilache, por aquel entonces ministro de Hacienda, ya impulsó a instancias del rey una Lotería Primitiva en España con el fin de llenar las maltrechas arcas del reino. En 1763, Esquilache mandó llamar al director de la 'lotto' napolitana, José Peya, para que la pusiera en marcha. Y así, con un real decreto del 30 de septiembre de ese mismo año, la lotería en España quedó instaurada.

■ Toda la información del sorteo de la lotería de Navidad, en directo

■ Comprobar mis números de la lotería de Navidad

Sin embargo, no fue hasta 1812, en plena guerra de Independencia, cuando se celebró el primer sorteo de lo que hoy conocemos como Lotería de Navidad. Un año antes, en el 1811, las Cortes de Cádiz habían aprobado por unanimidad un nuevo tipo de lotería importado del virreinato colonial de Nueva España (actual México). Fue llamado Lotería Moderna, para así poder diferenciarla de la Lotería Primitiva establecida por Esquilache.

Su impulsor, el ministro del Consejo y la Cámara de Indias, Ciriaco González Carvajal, la consideraba la fórmula perfecta "para aumentar los ingresos del erario público sin quebranto de los contribuyentes". El primer sorteo de Navidad llegó de la mano de la primera Constitución española, conocida popularmente como 'La Pepa', y se celebró el 18 de diciembre de 1812. El primer premio gordo de la historia fue el 03.604 y recompensaba al ganador con 8.000 pesos duros por 40 reales que valía el billete.

A partir de 1839, el sorteo navideño comienza a celebrarse regularmente. En 1892 recibe el nombre de Sorteo de Navidad, lo que sustituye a la leyenda utilizada hasta entonces de 'Prósperos de Premios', y cinco años más tarde, el nombre se oficializa apareciendo impreso en los boletos.

El impacto de la Guerra Civil

El sorteo caló hondo en la sociedad, tanto que ni siquiera algo tan duro como la guerra civil fue capaz de suspenderlo. En 1936, España se dividió en dos zonas: la republicana y la nacional. El bando republicano, ante el avance de las tropas franquistas hacia Madrid, trasladó el sorteo a la ciudad de Valencia. Fue el único momento en que se rompió la tradición de que los niños de San Ildefonso cantaran los premios. Al año siguiente, los republicanos temieron que los sublevados llegasen a la capital del Turia y trasladaron todos sus enseres a Barcelona, donde se celebró el sorteo de Navidad de 1937, en el Café Lyon D'Or.

En 1938 se produce un hito en la historia de la lotería navideña. Por primera y única vez en España se celebran dos sorteos de Navidad. El del bando nacional se realiza en Burgos y resulta premiado con el 36.758. En el del bando republicano, celebrado nuevamente en la capital catalana, el premio gordo corresponde al 22.655. Tras finalizar la guerra, el sorteo de Navidad vuelve a su sede única en Madrid en 1939.

Las niñas de San Ildefonso

Desde entonces, muchos han sido los cambios y evoluciones que ha ido sufriendo la lotería navideña a lo largo de los años. En 1979, un real decreto fijaba en 3 meses el plazo de tiempo para el cobro de los premios, que hasta entonces había sido de 6 meses. En 1984 aparecen por primera vez niñas de San Ildefonso entre los cantadores de números y premios; y no fue hasta el 2011, con los sorteos ya celebrándose en euros, cuando se incluyeron el total de 100.000 números dentro del bombo de bolas, al tiempo que se modificaba también el programa de premios por el cual el gordo pasaba a ser de 4 millones de euros por serie. Desde el 2013, el sorteo tributa un 20% en los premios superiores a 2.500 euros, y desde el 2014 las retribuciones se pueden cobrar a partir de la misma tarde del 22 de diciembre.

El Sorteo de Navidad ha demostrado, por tanto, ser capaz de resistir al paso de los años (e incluso de los siglos) hasta llegar hasta nuestros días. Pero si hay algo en lo que no cambia es en repartir ilusión y esperanza entre los jugadores. Mañana lo volverá a hacer.

Cronología