ASUNTOS PROPIOS

Virginia Feito, fenómeno literario: "Si alguien sabe qué he hecho, que me lo diga"

La actriz Elizabeth Moss ha comprado los derechos cinematográficos de su novela 'La señora March' (Lumen)

04-03-2022 CONTRA Virginia Feito, retrato en blanco y negro para Nuria Navarro para la contra . Imagen DAVID CASTRO

04-03-2022 CONTRA Virginia Feito, retrato en blanco y negro para Nuria Navarro para la contra . Imagen DAVID CASTRO / DAVID CASTRO

Núria Navarro

Núria Navarro

Por qué confiar en El PeriódicoPor qué confiar en El Periódico Por qué confiar en El Periódico

Elisabeth Moss, la Defred de 'El cuento de la criada', se apresuró a comprar los derechos cinematográficos de la novela 'La señora March' (Lumen) antes de que llegara a las librerías. Es "un ingenioso thriller psicológico al estilo de Patricia Highsmith", según 'The New York Times', que ha prescrito la influyente Oprah Winfrey a sus 20,7 millones de seguidores de Instagram. Sin embargo, su autora (y la futura guionista), la madrileña Virginia Feito, habla como si todas estas serpentinas no se las tiraran a ella. 

"Todo esto no me pega nada", confiesa.

Estoy muy contenta, pero todo el que me conoce sabe que soy muy hogareña, huraña incluso. Aunque se me dé bien aparentar comodidad en las relaciones sociales, estar con gente me chupa mucha energía. Así que llevaba cuatro años sin salir de casa y de repente...

... hace un Zoom con Elizabeth Moss.

Me puse 80 focos alrededor y deseé que no llamara a la puerta ningún vecino indignado. Mientras ella hablaba, yo intentaba –sin éxito– encontrar la manera de hacer una foto. Ella me lanzaba cumplidos, y yo hacía aspavientos: "No, tú más". Era como un bello animal salvaje al que no quería asustar. Traté de no seguir mis instintos y citarle su propia obra, o decirle: "¡Yo fui Peggy Olson!" [fue 'copy' en agencias de publicidad, como Moss en 'Mad Man'].

¿Por qué trabajó en publicidad cuando su familia podía costearle un año de escritura?

Al acabar la universidad me angustiaba volver a casa de mis padres a escribir un libro. No era responsable. Pasé por las agencias Saatchi, Señora Rushmore y El Ruso de Rocky [uno de los socios es su pareja], donde estaba increíblemente feliz. Al principio era emocionante ver tu guion en la tele, pero había demasiadas reglas y me empezó a dar pereza.

Improvise un último eslogan para vender 'La señora March'.

"Un ataque de ansiedad para el que lo busque". "Bienvenidos a la histeria". O mejor: "Lo siento".

Es rápida, sí.

Igual vuelvo, como sugiere un crítico en Amazon. Aunque, ¡nos ha jodido!, si las críticas buenas han sido del 'New York Times', ¿quién va a hacer caso a GregZ13?

"Estoy en crisis todo el rato. Tengo 'zero chill'"

¿Usted cómo se valora?

Honestamente, estoy en crisis todo el rato. No sé bien qué he hecho. Si alguien lo sabe, que me lo diga. Y no sé cómo mantenerlo. Envidio a Otessa Moshfegh, la autora de 'Mi año de descanso y relajación', que además de ser brillante, aparenta que las cosas se la sudan. ¡Es increíblemente 'cool'! Y yo tengo 'zero chill'. Estoy histérica todo el rato. Creo que el segundo libro que estoy escribiendo no va a gustar. Es como mi segundo hijo deforme.

"La escritura es tan libre y divertida que me siento como si estuviera engañando a Hacienda"

¡Madre mía! ¿Cuál es el secreto de la buena literatura?

El secreto es que no existe secreto. Es un trabajo tan libre y divertido que me siento como si estuviera engañando a Hacienda.

Le gusta indagar qué construye una identidad. ¿Qué hay tras la suya?

Le paso el número de mi psicóloga.

Mejor lo cuenta usted. Dedica el libro al Sr. y la Sra. Feito. ¿Empezamos por ahí?

Aunque varios lo niegan, en mi familia todos somos obsesivo-compulsivos. No, en serio, a mis padres les agradezco la literatura, el cine y el arte que permearon mi infancia. Mi madre aprovechaba cada historia y cada escena para darnos una lección de vida.

Los cuentos se los leía su padre, el economista y diplomático José Luis Feito.

Volvía tarde del trabajo y nos contaba a cada uno de los tres hermanos una historia distinta. A mí me relataba historias de niñas que se escondían en barcos que iban hacia el Nilo y descubrían misterios. Mi padre y yo compartimos afinidad por la literatura gótica y victoriana. Las Brontë, Wilkie Collins, Dickens... A los 11 o 12 años leí 'David Copperfield'.

¿Y recuerda lo primero que escribió?

'La nena danzó'. Tendría unos 5 años. Va sobre una niña que, cuando estaban todos dormidos, se come una tarta entera, se le caen todos los dientes y al día siguiente es millonaria porque ha pasado el ratoncito Pérez. Tres páginas que en mi familia son una leyenda.

"Lo que ocurre en Ucrania me hace mucho daño. No puedo hacer otra cosa que donar a Unicef y llorar"

¿Era excitante vivir en una embajada?

En París, donde estuvimos cuatro años, se hacían fiestas, pero no me enteraba de nada. Esas noches eran muy emocionantes porque mi hermano Dani y yo –y nos metían al gato– dormíamos juntos. Mi infancia fue una burbuja de privilegio. Sin embargo, el lujo que aparece en 'La señora March' viene de ver demasiado 'Sexo en Nueva York'.

Igual Elizabeth Moss le da un papel glamuroso en la película.

He sugerido un cameo, pero se rieron. Ahora estoy esperando el "go" para escribir el guion. No pidamos más.

No parece momento de pedir más.

Lo que ocurre en Ucrania me hace mucho daño. No puedo hacer otra cosa que donar a Unicef y llorar. Siento una enorme tristeza.

Suscríbete para seguir leyendo