Elecciones EEUU 2024
Votar como si la vida fuera en ello: el mensaje de Trump en el regreso a Butler, el lugar de su primer intento de asesinato
En el escenario de Butler, y en un baño de masas, el republicano busca reforzar sus opciones y cuenta con Elon Musk como invitado estrella

Elon Musk y Donald Trump, durante el mitin. / X


Idoya Noain
Idoya NoainCorresponsal en EEUU
Corresponsal en Estados Unidos desde 2001.
Entre los atributos de Donald Trump está saber cómo lanzar mensajes. Algunos los arroja de forma directa, terminante, a veces brutal. Otros son indirectos, a su manera sutiles. Los hay que llegan a través de emisarios y otros lo hacen envueltos en simbolismo.
De todos hubo este sábado en su mitin de regreso a Butler, en Pensilvania, el mismo lugar donde el 13 de julio sobrevivió un intento de asesinato y adonde volvía para darse un baño de masas, acompañado por Elon Musk como invitado estrella. Pero cuando se destilaban el recado único era cristalino: hay que votar, votar como si fuera la vida en ello.
La situación obliga. A un mes de las elecciones, la carrera por la presidencia de Estados Unidos en la que se mide a Kamala Harris tiene al republicano en una situación mucho más emparejada y reñida que la que tenía en julio cuando su rival demócrata era Joe Biden.
Por eso Trump hasta el 5 de noviembre necesita asegurar la movilización de todos los suyos, devotos entregados como las decenas de miles que se congregaban durante horas en una jornada de sol y calor más veraniego que otoñal en la explanada del Butler Farm Show, una fortaleza al aire libre donde eran visibles y palpables las reforzadas medidas de seguridad. Pero Trump necesita también llegar a más.
Eso explica en parte apariciones como la de Musk, esperado y jaleado como una estrella de rock por los presentes, pero que hablaba directamente también a quienes seguían por redes el mitin. Y explica también parte de la intervención del candidato a vicepresidente J.D. Vance, que se dirigía en un momento de su discurso a quienes lo estaban viendo por televisión. Y tanto el multimillonario como el senador de Ohio recalcaban también el mensaje de la jornada: registrarse y registrar; movilizarse y movilizar; votar, votar, votar.
Tributos
Todo llegaba, eso sí, envuelto en el aura de lo que sucedió el 13 de julio. Aquel día Trump salvó de milagro la vida, pero la perdió Corey Comperatore, un bombero que estaba entre los asistentes. Y a esa víctima se dedicaban buena parte de los discursos y tributos que, a partir de las 14.30, fueron calentando motores hasta la llegada de Trump en una fiesta ordenada y perfectamente organizada que tenía también aires de festival, con colas en camiones de comida y gente de todas las edades (en su inmensa mayoría blancos), oohs y ahhs cuando descendieron cuatro paracaidistas y cuando pasó el Air Force One y el rostro del ídolo, Trump, estampado en todo lo imaginable; de camisetas a gorras a banderolas o pendientes.

EFE
El candidato republicano salió al escenario sobre las 18.00 horas y arrancó con una muestra de su ingenio y genio político: “Como iba diciendo…”. La masa rugió, entusiasmada por esa idea de continuidad del discurso interrumpido por las balas de Thomas Mathew Crooks y subrayada por la proyección del mismo gráfico sobre inmigración al que Trump se volvió aquel 13 de julio, un gesto que le salvó la vida y repetía este sábado.
11 minutos después, justo en el momento en que hace casi tres meses sonaron los disparos, Trump pidió un momento de silencio por la víctima mortal del atentado. Empezó tras cuatro toques de campana y al homenaje, que los asistentes siguieron con profundo respeto y con gorras quitadas y manos en el corazón, le puso broche un ‘Ave Maria’ interpretada en vivo por un tenor . “Alguna gente no muere en vano y lo que él nos ha dejado es increíble”, dijo Trump.
Ese fue su tono durante algo menos de 20 minutos: el de un candidato que se anunciaba dispuesto a “sanar y reunificar” el país, el de un líder comprometido con su movimiento y dispuesto a “no ceder, incluso al enfrentar la muerte”.
Acusaciones
Como ya sucedió en la convención de Milwaukee, no obstante, Trump no pudo resistir su instinto incluso en un acto milimetrado para lanzar una imagen a la vez humana y heróica. Pronto empezó a salirse del guion conciliador que leía de los telepromters, Llevó el discurso por derroteros habituales en cuestiones como la demonización de los inmigrantes o en la descripción apocalíptica del país bajo la Administración de Biden y Harris, en exageraciones y falsedades. Y llegó a puntos extremos, como señalar a los demócratas como "el enemigo interior", responsables de su intento de asesinato, el pimero de dos que ha sufrido.
“Durante los últimos ocho años quienes quieren evitar que (el movimiento MAGA) alcancemos el futuro me han calumniado, me han sometido a juicios penales, me han imputado, han intentado sacarme de las papeletas y, quién sabe, quizá incluso han intentado matarme", dijo.
Para los críticos de Trump será el de siempre, pero no había ni uno en Butler. Aquí, en un ambiente de devoción, donde se hablara con quien se hablara solo se encontraban alabanzas a su figura y tesis políticas que hacen perfecto eco de su discurso, este era el líder al que quieren ver y oir.
“Solo él puede salvar este país”, decía sentada en la hierba Jill, una mujer de 60 años que había llegado desde Ohio con su hija. Se declaraba “agradecida de que Dios guiara la bala y Trump no muriera", una de las múltiples referencias a una supuesta intervención divina de la que también hablaba el propio Trump". Fue un milagro”, decía Jill. “Y estamos contando con los milagros para sobrevivir el mes que queda”.
Los fantasmas de noviembre
Trump y los suyos cuentan, no obstante, con algo más que la mano de Dios para intentar recuperar la Casa Blanca. Por una parte doblaban y redoblaban la llamada al registro, a la movilización y al voto no ya de los conversos presentes, sino de gente que tradicionalmente no vota. Y el propio Trump, en un vídeo grabado que se emitió antes de su discurso, lo hacía en un mensaje que expone su disyuntiva, y su paradoja. Llamaba a votar por anticipado, por correo... Las mismas herramientas que desde 2020 ha denostado y ha puesto bajo la sombra de supuesto fraude, asegurando que los demócratas las usan para “amañar” elecciones.
A la vez, se agitaban en Butler los fantasmas de que las elecciones no vayan a ser justas y se delineaban los planes para combatir resultados que no sean favorables., una estrategia que ha perfeccionado el intento de 2020 de revertir el resultado legítimo de las elecciones y que, fuera del universo MAGA, hace saltar las alarmas.
"Puedo anunciar que tenemos 200.000 voluntarios entrenados para ser trabajadores y observadores en centros electorales", proclamaba orgullosa en un discurso Lara Trump, nuera del candidato a la que en marzo colocó como co-presidenta en su remodelación del liderazgo del Comité Nacional Republicano. "Ya no es demócratas contra republicanos, ya no es izquierda contra derecha, ahora es el bien contra el mal", decía la esposa de Eric Trump .
Son términos de guerra que muchos de los asistentes al mitin recibían con entusiasmo pero ante la que algunos, pocos en cerca de una decena de entrevistas, reacccionan con preocupación. "Si no ganamos, tengo miedo de lo que va a pasar después del 5 noviembre", decía Jeff, un mecánico de aviación de Pittsburgh que antes fue miembro de la Marina y estuvo destinado en Rota. "Temo que lo que pasó en 2020 no fue nada comparado con lo que puede pasar esta vez".
- Rutte sugiere en Alemania el peligro de una 'tercera guerra mundial' concertada entre China y Rusia
- Trump anuncia aranceles del 30% a las importaciones de la Unión Europea a partir del 1 de agosto
- Milei sufre su peor derrota parlamentaria y política desde que gobierna Argentina
- Tierra (y no precisamente rara), trágame: momentos de sonrojo en el encuentro de Trump en la Casa Blanca con cinco líderes de África
- Guerra Israel, Irán y EEUU, hoy en directo: última hora del conflicto en Oriente Próximo
- Tymofiy Mylovanov, exministro de Economía de Ucrania: 'Una tregua solo será posible cuando Rusia entienda que el apoyo occidental no es solo simbólico
- Grok, la IA de Elon Musk, ensalza a Hitler y difunde mensajes antisemitas y teorías racistas
- Los niños de Srebrenica, 30 años después: las cicatrices del genocidio y una verdad histórica en disputa