Reportero del WSJ

Un tribunal ruso rechaza el recurso del periodista estadounidense Gershkovich contra su detención preventiva

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Gershkovich, que cumple la medida cautelar en la prisión de Lefórtovo, compareció con una sonrisa en la vista dentro de una cámara de cristal ante la presencia de numerosos periodistas

Evan Gershkovich

Evan Gershkovich / Reuters

Àlex Bustos

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Desde una jaula de cristal, el corresponsal de 'The Wall Street Journal' Evan Gershkovich escuchó este martes las malas nuevas: el Tribunal Urbano de Moscú rechazó el recurso del periodista estadounidense y deberá permanecer por lo menos hasta el 29 de mayo en un régimen de prisión preventiva en el centro penitenciario de Lefórtovo, en la capital rusa. Se le acusa de espionaje y de trabajar con la inteligencia estadounidense.

La defensa del reportero recurrió los dos meses de prisión preventiva que se le impusieron el pasado 30 de marzo en una vista cerrada sin presencia de abogados o medios de comunicación. Gershkovich estuvo sonriente con los presentes y los medios de comunicación desde la jaula en la que atendió a la vista. No pudo dirigirse a la prensa ni a ninguna otra persona.

Al tribunal acudió también la embajadora de Estados Unidos en Rusia, Lynne Tracy, que pudo visitar la víspera a su compatriota tras recibir la autorización de Moscú. "Reiteramos nuestro llamamiento para su liberación inmediata", aseguró este lunes la embajadora.  

Acusaciones negadas

Gershkovich fue detenido el 29 de marzo en la ciudad de Yekaterimburgo, a 1.800 kilómetros al este de Moscú. Según las autoridades, fue arrestado "con las manos en la masa", una acusación que rechazan tanto la Administración estadounidense como el propio 'Wall Street Journal'. La Casa Blanca pide su liberación inmediata.

La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, advirtió el lunes de que aquellos diplomáticos que creen división en la sociedad rusa serán expulsados después de que decenas de diplomáticos occidentales se personaran en el juicio contra el opositor, Vladímir Kara-Murzá, que fue condenado a 25 años de cárcel.

Decenas de periodistas independientes rusos escribieron una carta demandando su liberación y calificando de gratuita la acusación de espionaje en virtud del artículo 276 del Código Penal, cargo que puede suponer hasta 20 años de cárcel. Aunque las autoridades rusas no se han pronunciado oficialmente a favor de algo así, desde los medios estatales ya se está sugiriendo intercambiar a Gershkovich, al marine Paul Whelan y a Kara-Murzá por Julian Assange, fundador de Wikileaks retenido en el Reino Unido a la espera de su extradición a EEUU, donde está acusado de 18 delitos, entre ellos de espionaje. Quien pide este posible intercambio es una de las voces importantes del oficialismo ruso, Margarita Simonián, una de las más fervientes defensoras del régimen ruso y jefa de RT - antigua Russia Today-.