Tensión bélica

Médicos sin Fronteras: "Hemos encontrado minas antipersona en hospitales de Ucrania en funcionamiento"

La oenegé sanitaria alerta de la destrucción de estructuras sanitarias y los serios impedimentos para acceder a atención médica

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Los equipos de Médicos Sin Fronteras (MSF) en Ucrania denuncian la destrucción masiva y generalizada de estructuras sanitarias, así como los graves impedimentos a la atención médica bajo la ocupación militar rusa. "Hemos encontrado minas antipersonas en hospitales en funcionamiento", explica el coordinador general de MSF en Ucrania, Paulo Milanesio.

Declaraciones de Paulo Milanesio, coordinador general de MSF en Ucrania, sobre el hallazgo de minas antipersona en hospitales

Declaraciones de Paulo Milanesio, coordinador general de MSF en Ucrania, sobre el hallazgo de minas antipersona en hospitales. /

"Nuestros equipos fueron testigos directos de cómo casas, tiendas, parques infantiles, escuelas y hospitales quedaban reducidos a escombros. En 25 años de trabajo en zonas de guerra, quizá solo haya uno o dos casos en los que haya visto una devastación similar: lugares como Mosul o Grozni”, añade Christopher Stokes, coordinador de programas de MSF en Ucrania. "A lo largo de los 1000 kilómetros de línea de frente en Ucrania, algunas zonas simplemente han sido borradas del mapa”, afirma Christopher Stokes, coordinador de programas de MSF en Ucrania.

Los relatos de trabajadores sanitarios y pacientes que vivieron bajo la ocupación rusa reflejan graves restricciones de acceso a medicamentos, tratamientos y estructuras médicas vitales. MSF ha tratado pacientes con enfermedades crónicas que no habían recibido tratamiento durante meses.

Respeto del derecho internacional

Ante este panorama, MSF insta a todas las partes beligerantes a respetar el derecho internacional humanitario y su obligación de proteger a la población y las infraestructuras civiles, así como de garantizar el acceso sin trabas a medicamentos y suministros médicos vitales para las personas que lo necesiten.

Tras la escalada de la guerra en febrero de 2022, los equipos de MSF evaluaron las necesidades médicas y humanitarias de la población en 161 ciudades y pueblos de las regiones de Donetsk y Jersón para prestar asistencia médica a quienes vivían cerca de la línea del frente. A pesar de las peticiones para trabajar a ambos lados de la línea del frente, MSF sólo puede operar en zonas bajo control ucraniano y sus observaciones se limitan a ellas.