Escándalo en el Capitolio

El congresista de EEUU investigado por sus mentiras se retira temporalmente de dos comités

George Santos asegura que ha decidido apartarse para evitar que la "algarabía mediática" afecte a la actividad del Congreso

El congresista republicano George Santos abandona el Capitolio, este martes.

El congresista republicano George Santos abandona el Capitolio, este martes. / EVELYN HOCKSTEIN / REUTERS

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El congresista republicano George Santos, que reconoció haber incluido información falsa en su currículum y está siendo investigado por su carrusel de mentiras -que van desde asegurar que sus abuelos eran judíos y huyen del Holocausto, cuando nacieron en Brasil y eran católicos, a las dudas que ha levantado la financiación de su campaña-, ha decidido retirarse temporalmente de dos comités de la Cámara baja de EEUU a los que había sido asignado.

Santos explicó este martes a los medios que ha pedido al líder republicano del Congreso, Kevin McCarthy, ausentarse de los comités hasta que se "aclaren" los asuntos por los que se le investiga y así evitar que la "algarabía mediática" a su alrededor afecte al curso político.

Aunque se trata de una primera concesión, no hizo mención a la posibilidad de renunciar a su escaño, como le pidió formalmente el Partido Republicano hace unos días ante una situación cada vez más incómoda, ni se refirió a las peticiones de dimisión por parte de la mayoría de los votantes de su distrito, según una encuesta de Sienna Poll.

Decisión supuestamente propia

Antes de emitir el comunicado, Santos se reunió a puerta cerrada con sus compañeros en Washington, después de otra reunión con McCarthy el lunes por la noche en la que supuestamente fue el congresista quien lanzó la idea de apartarse de los comités, según indicó 'The New York Times'.

Santos, con una carrera meteórica a sus 34 años y que se presentaba como uno de los primeros republicanos abiertamente gay, ha admitido únicamente haber "embellecido" su currículum, como haberse graduado por una prestigiosa universidad por la que nunca pasó.

El republicano está siendo investigado en Estados Unidos por posibles actividades delictivas durante sus dos campañas en el Congreso, si cometió delitos relacionados con sus finanzas o declaraciones engañosas, y también en Brasil, por supuesto fraude hace años.