Conflicto en el este de Europa

Rusia minimiza el posible impacto de los tanques Leopard en Ucrania

El embajador ruso en Estados Unidos acusa a Washington de buscar una derrota estratégica de Moscú

El fabricante de los Leopard alcanza máximos históricos en bolsa tras el 'ok' de Berlín al envío de tanques a Kiev

El fabricante de los Leopard alcanza máximos históricos en bolsa tras el 'ok' de Berlín al envío de tanques a Kiev

Àlex Bustos

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Todo va según lo previsto y nada podrá cambiar el rumbo positivo de la operación en Ucrania, se sigue defendiendo desde el Kremlin. El mismo portavoz del Gobierno ruso, Dimitri Peskov, aseguró que enviar tanques Leopard 2 a Kiev “provocaría problemas” al país liderado por Volodímir Zelenski. Desde la embajada rusa en Washington también se ve con malos ojos el envío de tanques, el embajador Anatoly Antonov afirmó en Telegram que “es obvio que Washington está intentando a propósito infligirnos una derrota estratégica".

De este modo ha iniciado Rusia una estrategia para minimizar el impacto del envío de los tanques Leopard 2 pero sin dejar de criticar su envío. El propio Peskov arguyó que el envío de blindados “no interferiría con la consecución de los objetivos de la operación militar especial –como se llama al conflicto rusoucraniano en el oficialismo ruso– en Ucrania” ­­. Andrey Kartapolov, jefe del Comité de Defensa de la Duma Estatal, cree que enviar Leopard 2 a Kiev por sí solo no cambiará fundamentalmente la situación, pero sí lo haría "la preparación de nuevas unidades en Polonia o en el Oeste de Ucrania" para batallas en primavera o verano.

El subjefe del Comité de Defensa de la Duma Estatal Yuri Shvitkin sacó pecho de la superioridad técnica rusa afirmando que el tanque ruso T-90M Provry es “superior al tanque Leopard alemán”. La compañía nacional Uralvagonzavod - la mayor fabricante de tanques del mundo- hizo público el pasado 12 de enero que había entregado una nueva remesa de estos vehículos blindados, aunque no concretó el número. En servicio desde 2020, es una de las joyas de la corona del Ejército ruso por sus capacidades.

Estas capacidades no han impedido que las tropas ucranianas capturen algunos de estos vehículos, algo que es un inconveniente significativo para las fuerzas armadas de Rusia. El analista militar de la revista Ejércitos, Jesús Manuel Pérez Triana, asegura que en el caso de los modelos más nuevos tanto de Leopard como de T90M, "los rusos están varios peldaños por detrás de Occidente en electrónica", aunque matiza que si se trata de modelos Leopard 2 más antiguos - de los años 80 - "no hay ninguna ventaja por parte del (blindado) alemán".

Amistades africanas

Mientras tanto, el presidente ruso Vladímir Putin compareció desde el centro Sparrow Hills de la Universidad Estatal de Moscú. Desde allí defendió una vez más la necesidad de intervenir militarmente en Ucrania, ya que el propósito de la ofensiva según él es “proteger al pueblo y a la propia Rusia de las amenazas que se están tratando de crear en los territorios rusos históricos adyacentes”. Remarcó que los soldados rusos “que luchan allí protegen tanto a los habitantes del Dombás como a la propia Rusia”, a pesar de la condena internacional al mismo despliegue militar en territorio ucraniano.

Lejos del frente se encuentra el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, que sigue con su gira por África para afianzar la posición de Moscú en el continente. Este miércoles Lavrov anunció que Rusia entrenará a las Fuerzas de Seguridad suazis, y también colaborarían ambos países en el campo de producción de alimentos. Este país es la última monarquía absoluta del continente africano. A finales de 2022 el mismo canciller estuvo en Egipto, Etiopía, Uganda y Congo-Brazzaville con el mismo objetivo. En este 2023, Lavrov pasó antes por Sudáfrica, donde consiguió acordar la realización de maniobras conjuntas del ejército sudafricano con el ruso. Muchos países africanos han optado por no tomar partido en el conflicto rusoucraniano, tal y como ejemplifica la abstención en la sesión de Naciones Unidas que condenaba la ofensiva rusa en Ucrania de marzo de 2022, la mitad de las cuáles fueron de países africanos como la misma Sudáfrica.