La eurodiputada Eva Kaili tendrá que pasar la Navidad en prisión preventiva

La eurodiputada griega, Eva Kaili, destituida hace dos semanas como vicepresidenta del Parlamento Europeo e imputada por su presunta implicación en la trama de sobornos del llamado 'Qatargate', que ha salpicado de lleno al Parlamento Europeo, tendrá que pasar la Navidad en prisión preventiva. Tras la audiencia celebrada este jueves, la Cámara del Consejo de Bruselas -una especie de tribunal de primera instancia- ha desestimado la petición de la defensa de que fuera liberada con brazalete electrónico y ha decidido prolongar durante un mes la prisión preventiva. La decisión coincide con el anuncio de la Autoridad contra el Blanqueo de Capitales de Grecia de embargar un terreno de 7.000 metros cuadrados que Kaili y su pareja, el italiano Francesco Giorgi, habían adquirido en la isla de Paros.

"Hemos demandado que Kaili pueda ser puesta bajo vigilancia electrónica con un brazalete, participa en la investigación de manera activa y rechaza cualquier acto de corrupción", explicaba su abogado belga, André Risopoulos, a la salida de la vista de casi hora y media celebrada este jueves en el Palacio de Justicia de Bruselas. La petición, a tenor del comunicado emitido por la Fiscalía federal, ha sido desestimada aunque si el equipo que defiende a Kaili optar por recurrir la decisión dentro de las próximas 24 horas, la socialdemócrata griega tendrá que comparecer ante la corte de apelaciones en un plazo de 15 días.

"La señora Eva Kaili es inocente, jamás ha sido corrompida", ha añadido también su abogado griego Michalis Dimitrakopoulos, que ha viajado desde Atenas para la vista y la víspera visitó a su clienta en la prisión de Haren, muy cerca del cuartel general de la OTAN, y en la que se encuentra desde que fuera detenida el pasado 9 de diciembre por la policía belga, en el marco de una operación de la policía judicial sobre una presunta trama de corrupción y blanqueo de dinero supuestamente vinculada a Qatar y Marruecos. Durante la mismas las autoridades policiales hicieron más de una veintena de registros relacionados con eurodiputados, exeurodiputados e individuos vinculados al Parlamento Europeo y se incautaron de más de 1,5 millones de euros en metálico.

La operación dio lugar al arresto de seis personas aunque solo cuatro fueron finalmente detenidas acusadas de corrupción, blanqueo de dinero y pertenencia a organización criminal. Los restantes tres detenidos son la pareja de Kaili, Francesco Giorgi, el exeurodiputado Pier Antonio Panzeri y el lobista Niccolo Figa-Talamanca, los tres de nacionalidad italiana. Los tres comparecieron el pasado 14 de diciembre en la primera vista judicial. El juez que instruye el caso, Michel Claise, decidió mantener en prisión preventiva a los dos primeros mientras que Figa-Talamanca, secretario general de la ONG No Peace Without Justice, fue liberado con brazalete electrónico. Durante la operación también fueron detenidos el 9 de diciembre el sindicalista italiano Luca Visentini y el padre de la eurodiputada, Alessandro Kailis, pero fueron liberados dos días después.

El caso también ha salpicado a otros dos eurodiputados. Es el caso del socialista belga Marc Tarabella, cuyo domicilio fue registrado en presencia de la presidenta de la Eurocámara, Roberta Metsola, tal y como exige la ley belga aunque no ha sido ni imputado ni interrogado por la policía aunque ha sido suspendido en su partido en Bélgica. También ha saltado a la palestra el nombre del socialista italiano Andrea Cozzolino, jefe de Giorgi en el Parlamento Europeo, a quien habría acusado durante la primera vista ante el juez, y que también ha sido suspendido del grupo socialdemócrata en la Eurocámara. Tarabella ha asegurado desde el primer día que es inocente mientras que Cozzolino ha hecho público que quiere declarar ante un juez y que está dispuesto a renunciar a su inmunidad parlamentaria porque es inocente y se le está sometiendo a un juicio mediático.

Denuncia de las filtraciones

Tras la comparecencia de Kaili, sus abogados criticaron las numerosas filtraciones de la instrucción y confirmaron que la Fiscalía belga ha abierto una investigación al respecto. "Es una mera violación frontal de la instrucción y no soy el único que lo piensa: el fiscal general ha iniciado una investigación sobre esto", ha confirmado Risopoulos.

Durante los últimos días, varios medios belgas e italianos, como Le Soir y La Repubblica, han filtrado parte de las confesiones que los detenidos habrían realizado durante las audiencias y los interrogatorios. Por ejemplo, el hecho de que Kaili habría admitido que conocía la existencia de la trama, de las maletas llenas de dinero e incluso que habría pedido ayuda a su padre a quien la policía atrapó huyendo del hotel Sofitel de Bruselas con una maleta llena de fajos de billetes. También Giorgi, pareja de Kaili, habría confesado estar implicado, aunque eximió de cualquier responsabilidad a la madre de su hija, y lo mismo Panzeri, quien habría reconocido pagos de 50.000 euros de Catar y Marruecos en 2019, es decir, sólo después de haber abandonado el escaño de eurodiputado que ocupó entre 2004 y 2019.

Embargo en Grecia

Por otra parte, la Autoridad contra el Blanqueo de Capitales de Grecia embargó este jueves un terreno de 7.000 metros cuadrados de Kaili y su pareja en la isla de Paros. Se trata de una decisión enmarcada en la investigación penal preliminar que ha abierto la Fiscalía de Delitos Económicos de Grecia contra la exvicepresidenta del Parlamento Europeo por la presunta comisión de los delitos de blanqueo de capitales y soborno pasivo.

Según medios locales, el congelamiento de este inmueble podría allanar el camino para un juicio penal contra Kaili en Grecia si se demuestra que Giorgi compró el terreno con dinero procedente de actividades ilegales. Además, la misma autoridad ha bloqueado una cuenta bancaria común que la pareja utilizó para adquirir esta propiedad.