Brutalidad policial

La ONU denuncia las 23 muertes de menores en la represión de las protestas en Irán

Shamdasani reclama a Irán su obligación de proteger a los niños y respetar los derechos humanos de los manifestantes y presos

Protest in front of the Iranian Embassy in support of anti-regime protests in Iran following the death of Mahsa Amini

Protest in front of the Iranian Embassy in support of anti-regime protests in Iran following the death of Mahsa Amini / JUAN MEDINA

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La Organización de Naciones Unidas (ONU) ha denunciado este martes que un total de 23 menores han sido asesinados y otros muchos han resultado heridos en la represión de las protestas en Irán. La reunión informativa del organismo ha tenido lugar en Ginebra, y frente la evaluación de la situación de las protestas de la república islámica, la ONU también ha pedido el cese de la "desproporcionada" represión de las autoridades contra los manifestantes

La portavoz de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU Ravina Shamdasani, ha señalado que 23 niños murieron por disparos con municiones reales, con perdigones de metal a corta distancia o por brutales palizas. Asimismo, Shamdasani ha señalado que las fuerzas de seguridad están allanando las escuelas y arrestando a los menores y a los directores de los centros educativos.

Shamdasani ha expresado su especial preocupación por el asunto, y ha remarcado que Irán tiene la obligación de proteger los derechos de los niños, y respetar la libertad de expresión y de manifestación.

Detenciones "arbitrarias"

El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos considera "profundamente preocupantes" las informaciones que corroboran la respuesta violenta de las autoridades y la fuerza ejercida contra los manifestantes de las calles de Irán, que crean la sospecha de que se están produciendo detenciones "arbitrarias".

Las manifestaciones ciudadanas empezaron hace un mes, tras la muerte de la joven Mahsa Amini, de 22 años, detenida por supuestamente llevar mal puesto el velo y fallecida durante su custodia policial. Desde entonces, la ONU estima que al menos 90 miembros de la sociedad civil han sido detenidos, entre ellos periodistas, estudiantes, abogados, activistas medioambientales y artistas, lo que la organización ha calificado como "arrestos masivos".

Muchos de los detenidos fueron enviados a la prisión de Evin, donde el pasado sábado hubo un incendio que costó la vida de ocho internos y derivó en un enfrentamiento entre presos y funcionarios. Frente a estos hechos, la ONU también se pronuncia sobre el trato de los presos ya que ha detectado "patrones de malos tratos, torturas y negligencias médicas".

"Instamos a las autoridades iraníes a llevar a cabo investigaciones rápidas, imparciales e independientes de todos los supuestos abusos (...) y a garantizar el procesamiento de los responsables", ha reclamado la portavoz.

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