Finlandia cierra este viernes su frontera a los turistas rusos

El Gobierno de Finlandia ha aprobado este jueves el "cierre completo" de sus fronteras a los turistas rusos, aunque tengan visado expedido en un país del espacio Schengen, alegando que su llegada puede causar "un grave perjuicio para la posición internacional de Finlandia". El cierre se aplicará "hasta nuevo aviso".

La medida, anunciada el pasado viernes, entrará en vigor esta medianoche y persigue restringir significativamente el flujo de ciudadanos rusos que entran en el país nórdico, muchos de los cuales continúan viaje hacia otros destinos de la Unión Europea (UE).

Finlandia, con 1.340 kilómetros de frontera con Rusia, se convierte así en el último país comunitario limítrofe con el país euroasiático que opta por vetar la entrada a los turistas rusos, después de que hicieran lo mismo las tres repúblicas bálticas (Estonia, Letonia y Lituania) y Polonia hace dos semanas.

Movilización parcial de Putin

Helsinki toma esta decisión en medio de la huida masiva de rusos tras la orden de "movilización parcial" lanzada por Vladímir Putin el pasado 21 de septiembre y que ha provocado un alza en las llegadas al país nórdico. El ministro finlandés de Exteriores, Pekka Haavisto, ha admitido que esta circunstancia "ha tenido un impacto significativo" en el cierre de las fronteras.

No obstante, las autoridades finlandesas han establecido una batería de excepciones, para casos de visitas a familiares, estudios o viajes de trabajo, entre otros. El Gobierno también ha aclarado que no se limitará el tráfico de mercancías.

Con la medida, Finlandia espera reducir a la mitad el tráfico fronterizo. Según la agencia de fronteras europea, Frontex, más de 42.000 personas entraron en este país nórdico desde Rusia entre el 19 y el 25 de septiembre.