EEUU

El atestado de la orden de registro ratifica que Donald Trump hizo un manejo irregular y peligroso de material clasificado de Defensa

El afidávit con que se consiguió autorización para el registro de Mar-a-Lago se hace público con casi la mitad de las páginas ocultas para proteger fuentes y las pesquisas

El FBI y Justicia alegaron también que tenían "causa probable" para creer que encontrarían en la casa de Florida "pruebas de obstrucción"

El ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump

El ex presidente de Estados Unidos, Donald Trump / REUTERS/Carlos Barria

Idoya Noain

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Nunca han sido demasiado creíbles pero cada vez se debilitan más los argumentos de Donald Trump para cuestionar el registro que ejecutó el FBI el 8 de agosto en su residencia en Mar-a-Lago. Este viernes se ha hecho público por fin el afidávit con que se buscó y consiguió la autorización judicial para ese registro, inaudito en la casa de un expresidente de Estados Unidos. Y el documento de 38 páginas, pese a tener casi la mitad total o parcialmente ocultas para proteger fuentes, las pesquisas de un gran jurado y la investigación aún en marcha del Departamento de Justicia, ratifica que el republicano realizó un manejo irregular y potencialmente peligroso para la seguridad nacional de documentos clasificados al abandonar la Casa Blanca, llevándose ilícitamente a Florida material que contenía información de Defensa clasificada, y potencialmente trató de obstruir la investigación.

El manejo irregular de documentos, según demuestra el afidávit, se empezó a constatar en enero, cuando los Archivos Nacionales consiguieron un año después de que Trump dejara la presidencia que entregara 15 cajas con materiales que se había llevado. Cuando el FBI estudió el contenido de esas cajas en mayo, descubrió que entre otras cosas había Información Nacional de Defensa clasificada. Concretamente se hallaron 184 documentos clasificados, de los que 25 tenían la marca de "top secret", 92 la de "secreto" y 67 la de "confidenciales".

Los temores se dispararon dado que esos documentos podían contener información de espionaje obtenida por agentes clandestinos e información que se había interceptado a través de la ley que autoriza el espionaje de países y agentes extranjeros (que se ha usado también para el espionaje de los estadounidenses). Algunos de los documentos tenían, además, "notas escritas a mano" por el propio Trump. Y preocupó especialmente que "informes clasificados estaban sueltos, mezclados con otros documentos e inapropiadamente identificados".

"Causa probable"

Con esos precedentes, Justicia decidió poner en marcha el proceso para lograr luz verde para el registro. Y, según se lee en el atestado de la orden de registro, preparado por un agente especial del FBI cuya identidad también se ha ocultado, les movieron dos motivos. Consideraban que había "causa probable" para pensar que pese a la entrega de esas 15 cajas en Mar-a-Lago seguía habiendo material con información relevante para la defensa nacional. Y creían que había también "causa probable" para pensar que se encontrarían "pruebas de obstrucción".

La publicación del documento judicial, también extremadamente inusual, no sirve para determinar en qué punto está la investigación de Justicia, su alcance o si el fiscal general al frente del Departamento de Justicia, Merrick Garland, acabará decidiendo imputar cargos por algún delito a Trump, una decisión que garantizaría un profundo terremoto político. Sí subraya, no obstante, los problemas legales potenciales para el exmandatario, que podría haber cometido delitos violando la Ley de Espionaje y otros dos estatutos.

Aunque Trump ha tratado de protegerse asegurando que había desclasificado los documentos antes de llevárselos, un extremo que sus abogados defienden en una carta también hecha pública, el afidávit dice explícitamente que no hace falta que la información de defensa sea clasificada para violar la ley que prohíbe quedársela, transmitirla o perderla.

"Numerosos testigos civiles"

También este viernes se ha hecho público otro documento legal que, pese a tener igualmente muchas partes ocultas, da más información relevante sobre la investigación. Se trata del memorando con el que Justicia pidió y logró autorización para publicar el afidávit solo si se le permitía ocultar partes que considera sensibles, y el texto explica, por ejemplo, que Justicia y el FBI han hablado con "un número significativo de testigos civiles" para obtener la información sobre los documentos en Mar-a-Lago.

Trump ha reaccionado con un mensaje en la red social Truth en el que ha criticado al juez federal Bruce Reinhart, que autorizó el registro y ha tomado también las decisiones sobre la publicación de los documentos de Justicia. Le atribuye "animosidad y odio" hacia él. Uno de sus portavoces, además, ha insistido sin pruebas en que "es todo político".