El 'padre de las reformas' ruso Chubais, hospitalizado en Europa por una extraña enfermedad

El 'padre de las reformas' ruso, que renunció a su puesto como enviado especial del Kremlin debido a la guerra de Ucrania, Anatoli Chubáis, ha sido hospitalizado en algún lugar de Europa con un raro trastorno inmunológico que ataca el sistema nervioso, según informó este lunes una periodista rusa. Chubáis, de 67 años, abandonó Rusia tras dimitir en marzo.

El exalto funcionario ha sido diagnosticado con el síndrome de Guillain-Barré, una enfermedad causada por el sistema inmunológico que daña el sistema nervioso periférico, según citó la periodista y activista política rusa Ksenia Sobchak en Telegram. La repentina indisposición de Chubáis desencadenó todo tipo de rumores acerca de la posibilidad de que hubiera sido envenenado, una suerte que han corrido un buen número de altos funcionarios o miembros de las fuerzas de seguridad que huyeron a Occidente, como Serguéi Skripal o Aleksándr Litvinenko. El hecho de que no se diera a conocer el nombre del país en el que ha sido hospitalizado, así como la inspección del lugar donde se hallaba por parte de personal con trajes especiales no ha hecho más que azuzar estas especulaciones.

"Los médicos dicen que lo han encontrado a tiempo", ha explicado una fuente a Reuters bajo condición de anonimato. Algunos medios de comunicación y activistas de la oposición habían especulado con que Chubáis podría haber sido envenenado. "No creo que sea un envenenamiento", dijo una segunda fuente, que también habló bajo condición de anonimato y aseguró que el economista "todavía está en cuidados intensivos". "Es una enfermedad muy desagradable", dijo la fuente. "El principal problema es que el paciente deja de respirar". El enfermo puede hablar, aunque no caminar. Está siendo acompañado en todo momento en la clínica por su esposa, Avdotya Smírnova.

Quien en su día fue jefe de gabinete del expresidente Boris Yeltsin, era el representante especial del presidente Vladimir Putin para las relaciones con las organizaciones internacionales antes de su dimisión. Anteriormente, Chubáis formó parte de un grupo de economistas rusos que intentaron cimentar la transición al capitalismo tras la caída de la Unión Soviética en 1991. Fue el protagonista de la venta de algunos de los mayores activos industriales de Rusia en la década de 1990.

Frenéticas polémicas

Pese a ocupar un alto cargo en el Estado ruso, Chubáis ha mantenido durante estos últimos años frenéticas polémicas con individuos más recalcitrantes y radicales del régimen, por ejemplo con Maria Zakhárova, portavoz del Ministerio de Exteriores y uno de los primeros miembros de la élite rusa en ser sancionados nada más iniciarse la guerra. Chubáis aseguró que Rusia era un "país pobre", algo que indigno a la nacionalista diplomática. quien reaccionó de modo furibundo, atacando su gestión durante los difíciles años 90 posteriores a la disolución de la URSS.

El Kremlin, al menos oficialmente, ha expresado su "tristeza" por la noticia. por boca de su portavoz, Dmitri Peskov, e incluso se ha mostrado dispuesto a ayudar si se produce una petición en ese sentido por parte del afectado. "Por supuesto, es un ciudadano ruso; siempre que es posible, intentamos ayudar a los ciudadanos rusos", ha destacado Peskov.