Portugal lucha contra tres incendios agravados por las altas temperaturas

Más de mil bomberos combaten este sábado las llamas en el centro y el norte de Portugal, con especial preocupación por los fuegos de Ourém y Carrazeda de Ansiães y en medio de un empeoramiento de las condiciones meteorológicas, que llevarán los termómetros hasta 42 grados en varias zonas del país.

"Hay una tendencia de aumento del número de incendios", explicó a mediodía el comandante de Protección Civil André Fernandes, que indicó que el viernes se registraron 121 fuegos forestales, el pico de los últimos días.

Las condiciones meteorológicas "se agravan día a día", y este sábado se prevé que las temperaturas alcancen los 42 grados en algunas zonas, como el distrito de Santarém, al norte de Lisboa.

"Estamos viviendo una situación casi inédita desde el punto de vista meteorológico", aseguró Fernandes, que avisó de que "cualquier ignición tiene el potencial de generar un gran incendio".

En Santarém está el incendio que más esfuerzos concentra este sábado, el de Ourém, que arde desde el jueves y en el que trabajan casi 600 operativos, apoyados por cerca de 180 vehículos de extinción terrestre y siete medios aéreos.

El fuego, a unos 130 kilómetros al noreste de Lisboa, destruyó una vivienda y dos edificaciones anexas de otras y además obligó a realizas varias evacuaciones preventivas, pero todos los vecinos pudieron regresar ya a sus casas.

En Carrazeda de Ansiães, en el distrito norteño de Braganza, sigue activo el fuego que empezó también el jueves, donde trabajan más de 200 operativos, con unos 70 vehículos terrestres y cuatro aéreos.

Las llamas también avanzan en Ansião, en el centro y muy cerca de Ourém, que mantiene un frente activo.

Protección Civil informó de que la pasada noche ayudó en el combate, a pesar de que las condiciones no eran favorables, y se consiguió hacer una estabilización de la mayoría de los incendios, aunque no fue posible dominarlos.

En la jornada del viernes hubo una decena de operarios heridos leves y tres civiles tuvieron que recibir asistencia médica.

Situación de alerta

Portugal entró el viernes en situación de alerta por el riesgo de incendio, que se mantendrá hasta última hora del 15 de julio ante las previsiones meteorológicas para los próximos días.

Esta medida permite reforzar la movilización de agentes de vigilancia, patrullas para disuadir de comportamientos de riesgo y equipos de apoyo a las operaciones de protección y socorro.

Además, se prohíbe la realización de hogueras y quemas de restos agrícolas o forestales y el uso de juegos pirotécnicos.

"Este es un fin de semana de alto riesgo", alertó el primer ministro, António Costa, en un mensaje en su perfil oficial de Twitter, donde recordó que prevenir el fuego es "la mejor ayuda" que se puede dar a los bomberos.