Rusia recrudece su asedio a Kiev mientras el G7 impone nuevas sanciones

Kiev llevaba semanas en silencio, pero este domingo se ha despertado con el estruendo de cuatro fuertes explosiones: varios misiles de las tropas rusas han impactado contra un complejo residencial en el centro de la capital de Ucrania. El recrudecimiento del ataque a la ciudad se ha producido un día después de haber tomado por completo el control de Severodonetsk, ciudad situada en la región prorrusa de Lugansk. Además, las fuerzas prorrusas afirman haber entrado en Lisichansk, el último gran enclave bajo control de Kiev en la república independentista. Mientras, el G7 se reúne este domingo en Alemania, donde evaluará la guerra en Ucrania y la crisis económica colateral. También anunciará nuevas sanciones contra el Kremlin.

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, ha anunciado que los países participantes en la cumbre del G7 impondrán una prohibición sobre las importaciones de oro ruso. "Es una importante exportación que genera decenas de miles de millones de dólares para Rusia", ha hecho saber Biden en su cuenta de Twitter.

Si bien las sanciones occidentales para castigar a Rusia han cerrado en gran medida los mercados europeos y estadounidenses al oro ruso, el compromiso del G7 marcará una separación total entre Rusia y los dos principales centros comerciales del mundo, Londres y Nueva York.

Bombardeo contra un complejo residencial

Kiev no registraba ataques rusos desde comienzos de junio, pero el bombardeo que ha sufrido la ciudad durante la mañana de este domingo se ha saldado, por el momento, con una persona muerta, cinco heridos y decenas de desaparecidos. El impacto ha ocurrido en un edificio de nueve plantas del barrio de Shevchenkivski, en pleno centro de la capital, ha informado el alcalde, Vitali Klitschko.

La construcción ha quedado severamente dañada. "Escuchamos que las personas están atrapadas, están vivas. Los rescatistas ahora están tratando de sacarlas de ahí", ha añadido el alcalde. El impacto, según el portal 7dniv, ha desatado un incendio en las plantas superiores del edificio de nueve plantas, y dañado los cimientos de los siete primeros pisos, si bien buena parte del bloque todavía sigue en pie.

Las fuerzas prorrusas entran en el último gran enclave bajo control de Kiev en Lugansk

Tras la toma de la ciudad de Severodonetsk, las tropas rusas y las milicias de la autoproclamada república de Lugansk, reconocida por Moscú como estado independiente desde el pasado mes de febrero, han entrado a la ciudad vecina de Lisichansk, el último gran enclave ucranio en esta provincia oriental. Ya combaten dentro de la ciudad.

“La milicia popular y las fuerzas aliadas de la Federación de Rusia entraron en la ciudad de Lisichansk. Los combates se libran ya en la zona urbana”, ha dicho Andréi Morochko, oficial de las milicias de Lugansk. Por contra, el ejército ucraniano aseguró este sábado está reagrupando las tropas que tenía situadas en la ciudad de Severodonetsk, situada en la provincia de Lugansk y bajo total control de las fuerzas rusas y prorrusas, a Lisichansk, separada de la anterior urbe por el río Donets. Kiev, según el jefe de su inteligencia militar, Kirilo Budanov, está tomando esta decisión para tratar de obtener una ventaja táctica sobre las fuerzas del Kremlin.