Decisión gubernamental

La Iglesia Anglicana del Reino Unido se opone por carta a la deportación de migrantes a Ruanda

Más de 20 obispos han calificado la medida de "vergüenza" el día en que se fleta el primer vuelo con migrantes irregulares hacia el país africano

UK Prime Minister Boris Johnson hosts Portugal's PM Antonio Costa

UK Prime Minister Boris Johnson hosts Portugal's PM Antonio Costa / Chris Ratcliffe / POOL

El Periódico

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Este lunes un Tribunal de Londres ratificó la última y polémica medida migratoria aprobada por el Gobierno de Boris Johnson. Según anunció el primer ministro y defendió la ministra del Interior, la deportación de migrantes irregulares a Ruanda desincentivarán la llegada al Reino Unido de inmigrantes a través del canal de la Mancha.

Pero esta política migratoria no ha quedado exenta de críticas, más bien al contrario. Un total de 23 obispos, líderes de la Iglesia Anglicana, han manifestado su desagrado en una misiva dirigida al diario 'The Times'. En la carta, califican la estrategia de Johnson de "vergüenza para el país". Así, la máxima autoridad de la iglesia anglicana, el arzobispo de Canterbury, Justin Welby, asegrua en la carta que las “deportaciones, o devoluciones forzosas de los solicitantes de asilo a sus países de origen, no son el modo de afrontar esta situación. Es una política inmoral que avergüenza a Gran Bretaña”.

"Vamos a cumplir nuestro objetivo"

"En la reunión semanal con su gabinete de ministros, parcialmente televisada, Johnson insistió en que las numerosas críticas, "algunas desde sectores ligeramente inesperados", no les van a disuadir de aplicar esta controvertida política, que ha sido además demandada ante los tribunales.

"Vamos a cumplir nuestro objetivo, que es asegurarnos de que hacemos una distinción clara -que creo que todos pueden apreciar que es justa y razonable- entre la inmigración legal a este país por rutas seguras y legales, que apoyamos, defendemos y protegemos porque todos comprendemos los beneficios que trae, y la migración peligrosa e ilegal a través del Canal de la Mancha, que pretendemos detener", declaró.

El líder conservador mantuvo que deportar a los solicitantes de asilo recién llegados (en un principio, hombres solteros) para que su caso se tramite en Ruanda, donde ya se quedarían, es la única manera de combatir las bandas de delincuentes que organizan la travesía marítima desde Francia a Inglaterra.