Violencia machista

Los crímenes de honor sacuden Pakistán con mil mujeres asesinadas al año

Los asesinatos por "deshonrar" a la familia habitualmente quedan impunes o tienen penas reducidas

Imagen de activistas con pancartas contra los crímenes de honor en una protesta en 2016 en Islamabad (Pakistán) tras el asesinato de Qandeel Baloch

Imagen de activistas con pancartas contra los crímenes de honor en una protesta en 2016 en Islamabad (Pakistán) tras el asesinato de Qandeel Baloch / AAMIR QURESHI / AFP

Irene Medina

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El asesinato de dos hermanas paquistanís que residían en Terrasa por parte de su propia familia ha sacado a relucir la lacra de los crímenes de honor en el país del sur de Asia. En Pakistán, cerca de 1.000 mujeres son asesinadas cada año a causa de los conocidos como delitos de honor, según el Informe Global de Human Rights Watch (HRW) en 2022.

De acuerdo con la definición de esta organización humanitaria, este tipo de crímenes son actos de violencia, habitualmente asesinatos, cometidos por miembros masculinos de la familia contra miembros femeninos que se considera que han deshonrado a la familia.

Las hermanas paquistanís, de 20 y 24 años, fueron estranguladas y recibieron un disparo mortal mientras dormían. El crimen fue cometido por miembros de su propia familia, después de que las jóvenes, residentes en Catalunya, solicitaran el divorcio a sus primos, con los que las habían casado forzosamente. El suceso ha puesto el foco sobre los crímenes de honor y los matrimonios concertados, que son una forma más de violencia contra las mujeres.

Las dos hermanas paquistanís.

Las dos hermanas paquistanís. / POLICÍA DEL PUNJAB (PAKISTÁN)

Human Rights Watch señala que en Pakistán la violencia contra las niñas y mujeres es endémica, con crímenes como asesinatos, secuestros, ataques con ácido, violencia doméstica o matrimonios forzosos. Además, mueren asesinadas mil mujeres al año por crímenes de honor, según los defensores de derechos humanos.

El Parlamento aprobó en 2016 una ley que impone castigos más severos para estos crímenes y eliminó parcialmente el vacío legal del indulto para estos delitos, después de que la bloguera Qandeel Baloch fuera asesinada por su hermano por "deshonrar" a la familia, lo que causó una protesta generalizada en el país. Sin embargo, habitualmente estos casos siguen quedando impunes y el propio hermano de Baloch fue absuelto después de que sus padres lo "indultaran".

Países con 'crímenes de honor'

En otros países también están presentes este tipo de asesinatos por ‘motivos de honor’. En concreto, en Emiratos Árabes, la ley permite a las familias de la víctima de asesinato a que renuncien a su derecho a ver a la persona culpable castigada a cambio de una indemnización -conocido como dinero de sangre- o bien que elijan libremente indultarlos. En estos casos, el acusado puede ser sometido a una pena mínima de siete años de prisión en lugar de cadena perpetua. En los crímenes de honor, la familia de la víctima es también la del asesino, por lo que es probable que los hombres reciban penas más leves.

Por su parte, de acuerdo con el informe de HRW, en Irán, el Código Penal incluye sentencias reducidas para actos violentos, incluyendo asesinatos, por ‘motivos de honor’ o por encontrar a la esposa o a una mujer de la familia cometiendo adulterio o sexo fuera del matrimonio. En la misma línea, el Código Penal en Baréin también reduce las penas a los perpetradores de los llamados crímenes de honor.

Este tipo de leyes discriminatorias exponen a las mujeres a la violencia y en ocasiones las condenan a muerte, con un mensaje de impunidad para los perpetradores de los crímenes.

Matrimonios concertados

Asimismo, los matrimonios forzosos -tanto infantiles como adultos- son otra forma de violencia contra las mujeres. En el caso de Pakistán, el matrimonio infantil es un grave problema en el país, ya que el 18% de las niñas se casan antes de los 18 años y un 4% lo hace antes de los 15. En este sentido, el informe de HRW apunta que el Gobierno de Pakistán ha hecho poco para parar este tipo de matrimonios concertados y precisa que las mujeres de minorías religiosas son particularmente vulnerables a las bodas concertadas.

Los matrimonios concertados en la infancia también provocan que las niñas dejen la escuela a edades tempranas, como en el caso de Nepal y Nigeria. En concreto, Nepal tiene una de las tasas más altas de matrimonio infantil en Asia, ya que el 33% de las niñas se casa antes de los 18 años y el 8% lo hace a los 15 años. En el caso de los niños, el 9% se casa antes de los 18 años.

Save the Children trabaja en Sierra Leona, en la región de Pujehun, para evitar el matrimonio forzoso en chicas menores de 18 años. 

Save the Children trabaja en Sierra Leona, en la región de Pujehun, para evitar el matrimonio forzoso en chicas menores de 18 años.  / Pedro Armestre

Por su parte, en Nigeria no existe legislación contra el matrimonio infantil, lo que permite que muchas familias obliguen a sus hijas a casarse temprano. De acuerdo con una estimación de Unicef del año 2018, 22 millones de niñas y mujeres se casaron en la infancia, alrededor del 40% de todas las novias infantiles en la región de África Occidental y Central.

Asimismo, la pandemia del coronavirus también ha aumentado los matrimonios concertados, que están muy relacionados con el abandono escolar. Con los cierres de las escuelas y el aumento de la pobreza, muchas niñas de India, Bangladesh o refugiados sirios en Jordania o Líbano se vieron obligadas por sus familias a casarse, lo que ha impedido que retomen su formación educativa.

Permitido por ley

En el caso de Sudán del Sur, el matrimonio infantil también está muy extendido. Según Unicef, más de la mitad de las niñas sursudanesas -el 52%- de entre 15 y 18 años están casadas y algunas incluso se casan a los 12 años.

Por su parte, Malasia también permite el matrimonio infantil por las leyes civiles e islámicas y las niñas de 16 y 17 años pueden casarse con el permiso del ministro principal de su estado. Para los musulmanes, la mayoría de las leyes islámicas estatales establecen una edad mínima de 16 años para las niñas y 18 para los niños, aunque se permiten los matrimonios por debajo de esas edades con el permiso de un tribunal de la Sharia. 

En la misma línea, en Marruecos, el Código de Familia establece los 18 como edad mínima para el matrimonio. Sin embargo, permite a los jueces conceder exenciones para casar a niñas de 15 a 18 a petición de su familia.

Incumplen decisiones judiciales

Países como Tanzania tampoco han ilegalizado el matrimonio infantil, pese a que en este país una decisión del Tribunal Supremo, en el año 2016, obligaba a modificar la Ley de Matrimonio para elevar la edad legal de matrimonio a 18 años para niñas y niños.

Por su parte, Zimbaue tampoco aplicó durante 2021 la prohibición de los matrimonios infantiles y esta es una práctica que sigue muy extendida, principalmente entre las iglesias apostólicas indígenas. También incumplen la norma del Tribunal Constitucional, que declaró inconstitucionales los matrimonios infantiles en 2016 y fijó en 18 años la edad mínima para contraer matrimonio para niñas y niños, sin excepciones. 

Habitual en Occidente

El matrimonio infantil es más habitual en países en vías de desarrollo, ya que la pobreza económica es una de las principales causas de estas uniones. En este sentido, según cifras de Amnistía Internacional en 2021, las cifras son más elevadas en África subsahariana, donde aproximadamente cuatro de cada diez jóvenes se casan antes de los 18 años, y en el sur de Asia, donde se da en tres de cada diez. A estas dos zonas les siguen América Latina y Caribe, Oriente Medio y África del Norte, Europa oriental y Asia central.

Sin embargo, el matrimonio infantil se produce en todos los lugares del mundo, como Estados Unidos, donde la mayoría de los estados siguen permitiendo el matrimonio antes de los 18 años y, de acuerdo con un estudio de Unchained at Last -una organización sin ánimo de lucro que busca acabar con el matrimonio forzado e infantil-, cerca de 300.000 menores de 18 años se casaron legalmente en EE.UU. entre el año 2000 y 2018.

Asimismo, en el caso de España, la edad legal mínima para contraer matrimonio es de 16 años, pese a que el Comité de Derechos del Niño ha recomendado que se eleve a 18.