Continúan los intensos combates en la acería de Mariúpol, en el este de Ucrania

El comandante ucraniano que dirige las tropas atrincheradas en una planta siderúrgica de Mariúpol asegura que se están librando "batallas difíciles y sangrientas" contra las tropas rusas. La planta siderúrgica de Azovstal es el último bastión de la resistencia en Mariúpol y tomar la ciudad portuaria del sur es un objetivo clave para Rusia. En este contexto, Moscú ha informado de que el jueves se iniciará un alto el fuego de tres días pero las promesas anteriores siempre han fracasado. Por esta razón, Ucrania es escéptica y el presidente Volodimir Zelenski ha pedido al jefe de la ONU que ayude a evacuar a los heridos de la planta. También en otras zonas del país continúa la ofensiva rusa, especialmente en el este para establecer un "control total" sobre Donetsk y Luhansk.

Tras fracasar en la toma de la capital, Kiev, en las primeras semanas de una guerra que ha causado miles de muertos y ha arrasado ciudades, pueblos y aldeas, Rusia ha acelerado sus ataques en el sur y el este del país.

"Llevará tiempo simplemente sacar a la gente de esos sótanos, de esos refugios subterráneos. En las condiciones actuales, no podemos utilizar equipos pesados para retirar los escombros. Todo tiene que hacerse a mano", dijo ha explicado el presidente ucraniano en relación a la evacuación de civiles atrapados en la acería.

Moscú declaró la victoria en Mariúpol el 21 de abril tras semanas de asedio y bombardeos, pero la resistencia de las fuerzas ucranianas en Azovstal ha impedido que Rusia tome por completo la ciudad. Mariúpol es un objetivo importante en los esfuerzos de Rusia por aislar a Ucrania del Mar Negro -vital para sus exportaciones de grano y metales- y unir el territorio controlado por Rusia en el este del país con Crimea, tomada por Moscú en 2014.

Evacuaciones a cuentagotas

Naciones Unidas y Cruz Roja han evacuado esta semana a cientos de personas de Mariúpol y otras zonas. Pero se estima que unos 200 civiles, así como combatientes ucranianos, siguen atrincherados en la red de búnkeres subterráneos de la acería, según las autoridades ucranianas.

Más de 300 civiles fueron evacuados el miércoles de Mariúpol y otras zonas del sur de Ucrania en el marco de una operación conjunta de la ONU y la Cruz Roja, dijo la coordinadora humanitaria de la ONU para Ucrania, Osnat Lubrani. Pero nadie de Azovstal estaba entre el grupo, dijo Jens Laerke, portavoz de la oficina humanitaria de la ONU.

"Tememos que haya más civiles atrapados allí, sin embargo, y estamos preparados para ayudar", dijo Laerke en un correo electrónico.