Argentina busca ampliar el permiso de paternidad hasta los 90 días

El permiso de paternidad vigente en Argentina es uno de los más cortos de Latinoamérica: los hombres tienen derecho únicamente a dos días para cuidar de su hijo recién nacido. Para las madres, el permiso es de tres meses y, para las familias homoparentales y adoptivas, no hay ningún permiso.

El Gobierno argentino quiere corregir esta medida con un proyecto de ley que ampliaría el régimen de permisos hasta los 126 días en el caso de las "personas gestantes" y 90 días para las "personas no gestantes", independientemente de su género.

La iniciativa, que ha sido enviada al Congreso, tiene como objetivo crear un sistema integral de políticas de cuidados y contempla también los permisos por adopción.

Reparto más equitativo

Este lunes, Alberto Fernández, el presidente de Argentina, reconoció el trabajo de la mujer en la Casa Rosada al anunciar el proyecto "Cuidar en Igualdad": "Es hora de igualar a las mujeres y a las diversidades con los hombres para que todos tengamos los mismos derechos. El trabajo de la mujer, ese trabajo silencioso y tan importante que nos hace crecer no puede no ser reconocido. Es amor y es trabajo", dijo el presidente de Argentina.

Fernández subrayó que la "desigual distribución del trabajo de cuidado es el corazón de las desigualdades entre los géneros" y es necesario promover un reparto más equitativo. También aprovechaba para hacer hincapié en que el cuidado de los hijos era obligación de ambos progenitores: "La obligación ya no es de la madre sino de la madre y del padre y en conjunto hay que atender las necesidades de los hijos", señaló el presidente argentino.

En caso de que la iniciativa sea aprobada por las dos cámaras legislativas, el permiso de paternidad pasará a ser de 15 días y se irá ampliando de forma progresiva hasta alcanzar los 90 días en un máximo de ocho años, pasando a ser uno de los países con el permiso de paternidad más extenso.

Asumido por la seguridad social

En el caso de las madres, se contempla extender el permiso 36 días más de los vigentes, ya que se considera que ambos permisos están por debajo de las recomendaciones de la Organización Internacional del Trabajo.

El coste que tendrán los nuevos permisos y la extensión de los existentes será asumido por la seguridad social y no por los empleadores.

También se beneficiarán de la nueva medida todas aquellas personas que tengan que cuidar por enfermedad a alguien a su cargo, quienes verán ampliado el permiso de dos días a un máximo de 20 por año. Y, por último, aquellas mujeres que sufran violencia de género podrán optar a un permiso también de 20 días.

El Gobierno aseguró que el nuevo proyecto va en línea con otros que han buscado reconocer las tareas de cuidado, como el decreto que el año pasado reconoció aportes jubilatorios a las mujeres con hijos propios o adoptados.