Muere en enfrentamiento con la policía el bandido más buscado por el Gobierno de Venezuela

"Cayó". La información, lacónica, recorrió el Palacio de Miraflores a modo de susurro. No faltaron los cantos de victoria. El ministro de Interior, Justicia y Paz, Remigio Ceballos, le dio recién en la tarde del martes estado público a lo que había sucedido. Carlos Luis Revete, alias "el Koki", uno de los hombres más buscados en Venezuela y líder de una súper banda de delincuentes de todo tipo, murió durante una balacera de siete horas con fuerzas de seguridad. El enfrentamiento con decenas de integrantes de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) y el Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin), tuvo lugar en Las Tejerías, a 68 kilómetros de Caracas. "Seguimos tras la búsqueda de sus cómplices", informó Ceballos. No se ha informado oficialmente sobre otros decesos.

El cuerpo de "el Koki" fue trasladado a una morgue caraqueña, bajo fuerte custodia policial. Según el portal Contrapunto, sus familiares recibieron sus cenizas en una caja de cartón. Había nacido en 1978. Por años mantuvo el control de la Cota 905, como se conoce a la Avenida Guzmán Blanco que se extiende por la zona sur de la capital. Sobre sus laderas se levantan una serie de barriadas pobres donde se hacinan más 300.0000 personas. Revete la convirtió en su base de operaciones. Desde ahí manejaba diversos negocios: la droga, su principal fuente de acumulación, pero también los secuestros extorsivos, los asesinatos por encargo y el robo de automóviles. Su banda, de unos 60 hombres armados hasta los dientes, había logrado hacer pie en otras zonas populares de Caracas.

Nueve años atrás, cuando todavía se encontraba Hugo Chávez en el poder, las autoridades trataron de establecer una suerte de tregua no oficial con algunas de las bandas más peligrosas del país. Las llamadas "zonas de paz" tenían una peculiaridad: la policía no entraba a los territorios bajo control de los delincuentes. A cambio, estos se comprometían a no cometer asesinatos. El grupo de "Koki" se benefició de esa suerte de tregua no escrita. Cuando buscó expandirse, chocó con las fuerzas de seguridad.

El principio del fin

A comienzos de 2021, los uniformados intentaron capturarlo. La caza de Revete fue infructuosa después de tres días de choques con los bandidos que dejaron 23 muertos en el municipio caraqueño de La Vega. La cacería prosiguió. En julio pasado, las fuerzas de seguridad decidieron finalmente entrar a la Cota 905, a menos de tres kilómetros del Palacio de Miraflores. Murieron esa vez seis personas y fueron heridas otras 25. "Koki" logró huir. El Gobierno ofreció 500.000 dólares a cambio de datos sobre su paradero. "Pronto les prendo Caracas en llamas, el Palacio ese les va quedar vuelto nada, metance (métanse) en lo suyo que si atacó van a quedar locos", amenazó el maleante desde una cuenta de Facebook.

Por varios meses su paradero devino uno de los grandes misterios de Venezuela. Algunas versiones periodísticas consignaron de repente que se encontraba en la ciudad colombiana de Cúcuta. Esa información le permitió a Nicolás Maduro reforzar su hipótesis de vínculos entre Reverte y paramilitares de extrema derecha del país vecino. Luego Maduro dijo que era el propio Gobierno de Iván Duque el que le protegía al forajido y sus laderos. "Les daban droga y armas para que armaran la guerra en Caracas". Fueron las autoridades colombianas las que terminaron por confirmar la presencia del delincuente en la zona fronteriza.

La operación Gran Cacique Guaicaipuro II que terminó con las andanzas de Revete se reactivó semanas atrás cuando las autoridades detectaron en el estado de Aragua movimientos que llevaron a la captura de otro delincuente de peso, Carlos Enrique "el Conejo" Rodríguez. Grande fue la sorpresa de los policías al enterarse que "Koki" andaba cerca porque, consignaron distintos medios, estaba tratando de forjar una alianza con Rodríguez.

La deuda del Estado

Odalis Caldera ex funcionaria del Cicpc y ex secretaria de Seguridad y Orden Público del estado Zulia, consideró que, tras la caída de Revete, el Gobierno debe trabajar con denuedo para "desarticular a todos los Kokis" que existen en Venezuela y ejercen el terror en las poblaciones con "armamento de alto calibre". Los especialistas calculan que en todo el país hay unas 18.000 bandas de delincuentes. Un 60% de esos grupos se dedican a actividades violentas. Controlan territorios sobre la base de la extorsión, el secuestro y el tráfico de drogas.