Crisis sanitaria global

Francia elimina el uso obligatorio de la mascarilla en el exterior

El país galo quita la limitación de aforos y el teletrabajo obligatorio

Pasajeros en la estación de tren de la Gare de Lyon en Paris, Francia

Pasajeros en la estación de tren de la Gare de Lyon en Paris, Francia / EFE/EPA/YOAN VALAT

Enric Bonet

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Primera etapa en una nueva desescalada de las restricciones por el covid-19 en Francia. El Gobierno ha levantado este miércoles una serie de medidas que estaban en vigor desde el mes de diciembre por el embate de la variante ómicron, como la mascarilla en espacios exteriores, que deja de ser obligatoria.

Además del fin del tapabocas en la calle, también se pone punto final a la exigencia del teletrabajo. Aunque en Francia no existe una ley que imponga la obligatoriedad del trabajo a distancia, el Ejecutivo de Emmanuel Macron pidió en diciembre a las empresas que respetaran al menos tres días de teletrabajo cada semana en aquellos sectores en que fuera posible.

Desaparece la limitación de aforo

Otro de los cambios que entran en vigor este miércoles es que dejan de estar limitados los aforos para los espectáculos, reuniones públicas o acontecimientos deportivos, que eran de 2.000 personas en salas o pabellones cerrados y 5.000 en estadios. No obstante, en su interior habrá que continuar llevando mascarilla y en muchos casos se exigirá para entrar el certificado de vacunación, que solo disponen las personas con una pauta de vacunación completa (lo que incluye la tercera dosis, siete meses después de la segunda) y que reemplazó el pasaporte sanitario el 26 de enero.

El primer ministro Jean Castex anunció el levantamiento de las restricciones el 20 de enero, una decisión que en ese momento resultó sorprendente al producirse en plena ola de casos. Desde entonces, la situación sanitaria ha mejorado ligeramente en el país vecino. Francia registró el martes cerca de 417.000 casos diarios y 357 fallecidos. La presión sanitaria sigue siendo importante, pero inferior a las oleadas precedentes en un país en que el 78% de la población está vacunada.

Próxima fase, 16 de febrero

"Tenemos que seguir vigilando, ya que la presión hospitalaria se mantiene elevada. (...) Aquellos que piensan que hemos acabado con la epidemia se equivocan", aseguró Macron en una entrevista publicada este miércoles en el diario regional La Voix du Nord. El contexto de precampaña electoral —las elecciones presidenciales francesas se celebrarán el 10 y 24 de abril— favorece que el ejecutivo macronista mantenga su calendario de levantamiento de restricciones, cuya segunda etapa está prevista para el 16 de febrero. Desde la oposición, pero también médicos y epidemiólogos, criticaron el carácter "electoralista" de estas decisiones.

A partir de mediados del mes que viene, podrán reabrir las discotecas, clausuradas desde el 10 de diciembre. También volverán a organizarse conciertos en los que el público esté de pie y se podrá consumir en las barras de los bares y los restaurantes. Si de nuevo las condiciones sanitarias lo permiten, a la vuelta de las vacaciones escolares de febrero se relajará el protocolo sanitario de los centros escolares.

Con este levantamiento de restricciones, Francia sigue el ejemplo de otros territorios europeos, como Dinamarca, que eliminó todas las restricciones el lunes, o Noruega, que ha levantado también este miércoles limitaciones en aforos, la recomendación del teletrabajo o las medidas en los colegios. El Reino Unido también ha recuperado casi la normalidad esta semana, diciendo adiós a las mascarillas y el pasaporte de vacunación.