Fuerte tormenta de nieve

Bombogénesis en el noreste de Estados Unidos: la nieve paraliza la costa este del país

A las 9.30 hora local de Nueva York (14.30 GMT) 3.520 vuelos se habían cancelado en el país, según según el sitio de seguimiento FlightAware.

En qué consiste una bombogénesis

Una máquina quitanieves trata de limpiar Times Square en Nueva York

Una máquina quitanieves trata de limpiar Times Square en Nueva York / REUTERS/Andrew Kelly

El Periódico

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Más de 3.500 vuelos han sido cancelados este sábado por la potente tormenta de nieve que azota desde anoche el noreste de Estados Unidos con temperaturas muy por debajo de cero grados centígrados y fuertes vientos. La tormenta, conocida por el nombre de Keanan, se extiende desde el oriente del estado de Virigina hasta Maine, en el extremo nororiental del país. Este fenómeno es conocido por los meteorólogos como bombogénesis.

Se espera que en numerosas zonas la nieve llegue a los 30 centímetros y que alcance hasta 60 centímetros en lugares como Massashusetts, incluida la zona metropolitana de su capital, Boston. Las autoridades de los estados afectados han pedido a los ciudadanos que eviten los desplazamientos. Un total de 886 vuelos se cancelaron en el aeropuerto JFK de Nueva York, otros 556 en el también neoyorquino aeródromo de LaGuardia y hasta 608 se suspendieron en el aeropuerto de Newark, situado en el vecino estado de Nueva Jersey.

Nueva Jersey y Nueva York, que han amanecido cubiertas por la nieve, se mantienen en estado de emergencia desde anoche y muchos servicios y establecimientos han anunciado que no abrirán sus puertas hoy. Esta ultima ciudad amanecía con temperaturas de menos nueve grados centígrados y se espera que las máximas no superen los menos seis. Se emitieron alertas de heladas incluso en Florida (sureste), donde el Servicio Meteorológico Nacional (NWS, por sus siglas en inglés) advirtió incluso sobre el riesgo de caída de iguanas --una especie de lagartos que puede pesar hasta nueve kilos-- de los árboles debido a que quedan congeladas temporalmente.

Apagones

Máquinas esparcidoras de sal y quitanieves trabajan en las calles de Nueva York, donde el sábado por la mañana se acumulaban en las calles unos 10 centímetros de altura de nieve. El alcalde Eric Adams pidió a través de la red Twitter a los neoyorquinos quedarse en casa pues "la Madre Naturaleza suele hacer lo que quiere".

El NWS advirtió sobre "condiciones peligrosas de tormenta de nieve" a lo largo las costas del Atlántico y Nueva Inglaterra, con acumulaciones de nieve previstas de más de 60 cm en las afueras de Boston. Los pronósticos hablan de nevadas de entre 60 y 120 cm por hora, y los fuertes vientos amenazan con provocar "cortes de energía dispersos". Igualmente pueden esperarse apagones y la imposibilidad de transitar en carreteras, dijo el servicio.

Los gobiernos de los estados de Nueva York y Nueva Jersey declararon el estado de emergencia y la alcaldesa de Boston, Michelle Wu, decretó emergencia por nieve. "Se va a poner bastante feo", señaló Wu en una entrevista televisiva este sábado. "Va a ser una tormenta histórica", acotó.

Acopio de víveres

Los residentes de Massachusetts se apresuraban el viernes a comprar comestibles, así como un productos para derretir el hielo y la nieve con la intención de ayudar a mantener despejadas las aceras y las entradas de sus casas. La mañana del sábado, Obras Públicas de Boston informó que 500 quitanieves ya estaban trabajando en las calles de la ciudad.

La tormenta provocará temperaturas extremadamente frías con rachas de viento peligrosas entre el sábado por la noche y el domingo por la mañana, indicó el servicio meteorológico.

"Vuelvan a casa esta noche con cuidado, quédense en casa durante el fin de semana, eviten cualquier viaje innecesario", dijo la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, en un comunicado, señalando que habría nevadas especialmente fuertes en Long Island, Nueva York y la zona baja del valle del Hudson.

También instó a las personas que tenían que viajar a llenar los tanques de gasolina de sus autos y llevar suministros como raspadores de hielo, mantas y agua en sus vehículos.

El servicio meteorológico de la región indicó que la tormenta se intensificaría rápidamente en las siguientes 24 horas, y que la presión podía caer fuertemente generando un evento al que a veces se hace referencia como "ciclón bomba".

La tormenta llega después de otra similar que cubrió de nieve hace dos semanas gran parte del este de Norteamérica, desde Georgia hasta Canadá, dejando muchos hogares sin luz y perturbando miles de conexiones aéreas.