Plaza vacante

Un juez progresista del Tribunal Supremo de EEUU tiene previsto jubilarse

El magistrado, de 83 años, es conocido por sus sentencias en defensa del aborto y en contra de la pena de muerte

La plaza que quedaría libre daría la oportunidad a Joe Biden de nombrar a la primera jueza negra de la historia para la máxima instancia judicial

Stephen Breyer, miembro de la Tribunal Superior de Justicia de EEUU, en una conferencia en Boston

Stephen Breyer, miembro de la Tribunal Superior de Justicia de EEUU, en una conferencia en Boston / BRIAN SNYDER/EPC

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El juez progresista Stephen Breyer, uno de los nueve integrantes del Tribunal Supremo de Estados Unidos, tiene previsto jubilarse cuando concluya en julio el actual curso judicial, informaron medios locales. La jubilación del magistrado daría al presidente estadounidense, Joe Biden, la oportunidad de confirmar a un juez de corte progresista para el Tribunal Supremo, donde los conservadores actualmente tienen mayoría.

No obstante, la portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo en un mensaje en Twitter que el Gobierno no tiene información sobre los planes de Breyer, quien a sus 83 años es el integrante de más edad de la corte. "Siempre ha sido la decisión de cualquier juez del Tribunal Supremo ver si decide jubilarse, cuándo y cómo quiere anunciarlo, y ese sigue siendo el caso hoy. No tenemos detalles adicionales o información para compartir desde la Casa Blanca", manifestó Psaki en Twitter.

Con 83 años, Breyer es el miembro de más edad del Tribunal Supremo, al que llegó en 1994 tras ser nominado por el entonces presidente demócrata Bill Clinton (1993-2001) y, enseguida, se convirtió en una de las voces progresistas de la corte. Conocido por sus preguntas incisivas durante los argumentos orales, Breyer siempre defendió que la Constitución debe interpretarse dentro del contexto de cada época, lo que en algunas ocasiones le valió choques con jueces más conservadores.

Aborto y pena de muerte

Una de las sentencias más conocidas que escribió Breyer tiene que ver con el derecho al aborto. En 2016, el juez se encargó de escribir el fallo que tumbó una ley de Texas y que había servido para cerrar la mitad de las clínicas abortivas de ese estado. En otra ocasión, en 2015, se desmarcó de la mayoría de los miembros del Tribunal Supremo y, en una nota aparte, consideró que la pena de muerte se había convertido en una condena tan arbitraria en Estados Unidos que probablemente era inconstitucional.

Desde hace meses, grupos progresistas como "Demand Justice" han pedido a Breyer que se jubile para que Biden pueda nominar a un sustituto aprovechando que el Partido Demócrata domina el Senado por un solo voto, del que depende la confirmación de los jueces del Tribunal Supremo. De esta forma, el presidente estadounidense no podría permitirse perder ningún aliado dentro de la bancada demócrata, para ello tendrá que contar con el apoyo de los dos senadores más conservadores dentro de la facción demócrata, Joe Manchin de Virginia Occidental y Kyrsten Sinema de Arizona, que en más de una ocasión han votado en contra de alguna de las resoluciones propuestas por el partido de Biden.

Primer mujer negra en el Supremo

La promesa del presidente de Estados Unidos de nombrar a una mujer afroamericana en la Corte Suprema sigue en pie, dijo Psaki mientras medios estadounidenses informaban sobre la jubilación de un juez de la poderosa institución. "El presidente dijo y reiteró su promesa de nombrar a una mujer negra para la Corte Suprema y esa promesa sigue en pie hoy", declaró Psaki.

Durante la campaña electoral de 2020, Biden prometió que si tenía la oportunidad nominaría a la primera jueza afroamericana para la máxima instancia judicial. La Casa Blanca aún no ha dado a conocer sus opciones al respecto, pero dos posibles candidatas son Leondra Kruger, actual jueza en el Tribunal Supremo de California, y Ketanji Brown Jackson, a quien ya consideró Barack Obama en 2016 para otra vacante en el Supremo y que trabajó como secretaria judicial para el propio Breyer.