João Ferreira, miembro de la comisión política del Partido Comunista Portugués (PCP)

João Ferreira, del Partido Comunista Portugués: "Los socialistas han mostrado una intransigencia total"

El exeurodiputado comunista, actual concejal en Lisboa y una de las caras más visibles del partido, responsabiliza al Partido Socialista del fracaso de los presupuestos y se muestra abierto a un nuevo pacto después de las elecciones del 30 de enero

João Ferreira

João Ferreira

Lucas Font

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El voto en contra del Partido Comunista Portugués (PCP) al Presupuesto del Gobierno socialista el pasado octubre fue el detonante de la convocatoria anticipada de elecciones en Portugal, previstas para el próximo 30 de enero. Casi tres meses después de esa decisión y con las encuestas en contra, los comunistas insisten en su voluntad de llegar a acuerdos y achacan al Partido Socialista una “intransigencia total” a la hora de atender sus propuestas. Una intransigencia que, según João Ferreira -una de las caras más visibles del partido y posible secretario general en el futuro-, responde a la voluntad de los socialistas de obtener una mayoría absoluta que les permita librarse definitivamente de la influencia de sus antiguos socios. Ferreira atiende a EL PERIÓDICO, y a otros medios extranjeros, a las puertas de una campaña en la que no participará el líder de su partido, Jerónimo de Sousa, por un problema de salud que le ha obligado a pasar por el quirófano.

¿Qué hará el PCP en caso de que el PS vuelva a ganar las elecciones?

Dependerá de la relación de fuerzas que obtengamos en el Parlamento. Nosotros siempre hemos dicho que antes de discutir con quién se va a formar un Gobierno tenemos que preguntarnos para qué se va a formar. Si ese Gobierno está dispuesto a abordar la subida de los salarios, a asegurar una distribución de la riqueza más justa y a dinamizar el mercado interno, el PCP siempre estará dispuesto a contribuir a estas soluciones con la fuerza que obtenga tras las elecciones.

¿Mantendrán entonces las mismas exigencias que hicieron durante la negociación de los Presupuestos?

Nosotros no hicimos exigencias, no fue así como planteamos la discusión de los Presupuestos. Hicimos un esfuerzo de aproximación en materias como el salario mínimo, cuya subida aceptamos que fuera progresiva hasta los 850 euros en 2023. En otras cuestiones el PS ha mostrado una intransigencia total, como en las alteraciones a la ley laboral para dar más fuerza a los trabajadores en las negociaciones colectivas o en garantizar la dedicación exclusiva de los sanitarios al Servicio Nacional de Salud (SNS). Nuestra disponibilidad para llegar a acuerdos se mantiene, la pregunta es si el PS está interesado en esos acuerdos.

Las encuestas apuntan a una pérdida de votos del PCP en las próximas elecciones, ¿qué tiene que hacer su partido para revertir esta situación?

No queremos entrar a valorar las encuestas, estamos acostumbrados a ver grandes diferencias entre las estimaciones y el voto real. Pero es cierto que estamos en un contexto difícil, porque después del rechazo a los Presupuestos sabíamos que íbamos a estar ante una operación de victimización por parte del PS y de manipulación de las razones que provocaron el rechazo en el Parlamento. Una situación que no es fácil de contradecir, teniendo en cuenta que en los medios de comunicación dominantes hay una narrativa que no se aproxima a la realidad, pero que acoge esta victimización.

En algunos países europeos la extrema derecha ha conseguido calar en algunas zonas tradicionalmente comunistas. ¿Le preocupa que se produzca una situación parecida en Portugal?

La aparición de un nuevo partido de extrema derecha resulta fundamentalmente de una recomposición en el campo de la derecha. Los partidos de derecha estuvieron asociados a un programa devastador desde el punto de vista social entre 2011 y 2015, y cuando se acumula la insatisfacción entre la población, determinados intereses sociales y económicos intentan aprovechar este descontento y manipularlo. Si queremos combatir eso, tenemos que responder a las causas de insatisfacción popular. No creo que estemos ante un crecimiento imparable o significativo de estas fuerzas, aunque tenemos que estar pendientes de este problema.  

¿Cómo afecta la ausencia en la campaña del secretario general de su partido, Jerónimo de Sousa?

Ha sido una situación inesperada a la que había que responder con urgencia. Todo apunta a que dentro de 10 días el secretario general podrá volver a su actividad normal, con lo que podría llegar a los últimos días de la campaña. En cualquier caso, la campaña de nuestra formación es una campaña de masas, que apuesta por el contacto directo con los votantes, y tenemos miles de activistas y candidatos comprometidos con ese trabajo.