Sudeste Asiático

Indonesia aprueba la construcción de su nueva capital en la isla de Borneo

La actual sede administrativa, Yakarta, se hunde más de siete centímetros cada año

La nueva ciudad, cuya construcción está prevista hasta 2045, será una urbe inteligente y con "cero emisiones" contaminantes

EFE

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El Parlamento indonesio ha aprobado este martes una ley que da luz verde al traslado de la capital administrativa desde Yakarta a una nueva ciudad que será construida desde cero en la isla de Borneo, que alberga una de las selvas tropicales más grandes del mundo. La nueva ciudad, que tendrá el nombre de Nusantara, se construirá a unos 2.000 kilómetros de Yakarta, que seguirá siendo la capital económica, según indicaron fuentes oficiales. La Cámara baja del Parlamento indonesio aprobó el marco legislativo del proyecto, que había sido anunciado por el presidente Joko Widodo en 2019. Asimismo, la ministra de Finanzas, Sri Muyani, afirmó que la ley estipula cómo será el desarrollo de esta nueva ciudad, con un primer periodo hasta 2024 en que la construcción se beneficiará de fondos dedicados a la recuperación económica tras la pandemia.

La nueva capital ocupará más de 56.000 hectáreas en la provincia de Kalimantan Este, en Borneo, isla que actualmente se reparten Indonesia, Malasia y Brunei. En total, y con vistas a una expansión del proyecto, se han reservado unas 256.000 hectáreas. Las primeras maquetas de la nueva capital muestran un proyecto de ciudad inteligente, construida entre árboles, pero por el momento no hay una idea más concreta sobre su apariencia. La construcción tendrá varias etapas hasta 2045. Un futuro decreto presidencial detallará el presupuesto, estimado previamente en 33.000 millones de dólares. La futura ciudad estará gobernada por la autoridad gubernamental para la capital, una nueva entidad dirigida por un responsable nombrado por el presidente para un mandato de cinco años, según la ley adoptada por el Parlamento. Además, el jefe del Ejecutivo indonesio declaró el pasado lunes que en Nusantara habrá "cero emisiones" contaminantes y "los habitantes estarán cerca de todo, podrán desplazarse en bicicleta o a pie".

El ministro de Planificación del Desarrollo Nacional, Suharso Monoarfa, confirmó el lunes que Widodo, ha decidido que la nueva ciudad se llame Nusantara, archipiélago en español, una palabra con la que los indonesios se refieren habitualmente a todo el país. La construcción debía haber empezado a finales de 2020, pero se pospuso por la pandemia, ya que Indonesia ha sido el país más castigado del sudeste asiático, con más de 4,2 millones de casos y 144.000 fallecidos.

Una ciudad que se hunde

El traslado de la capital ha sido un proyecto recurrente de los sucesivos gobiernos desde mediados del siglo pasado, cuando se propuso la urbe de Palangkaraya, situada en la isla de Borneo, como ciudad principal. Yakarta, que se encuentra en un 40% por debajo del nivel del mar, se hunde cerca de 7,5 centímetros de media al año, según las últimas estimaciones oficiales, aunque se han construido varios diques de contención para tratar de frenar el avance del mar. Debido a esto y a las lluvias propias del clima tropical, Yakarta es propensa a sufrir fuertes inundaciones, las últimas tuvieron lugar el pasado mes de diciembre y dejaron más de 39 distritos de la ciudad bajo el agua. La actual capital, situada en el noroeste de Java, es una impresionante conurbación de más de 30 millones de habitantes que sufre la falta de infraestructuras y se ve paralizada por atascos gigantes y una contaminación muy elevada.

Esta decisión de traslado de capital no es una práctica extraña entre los países del sudeste asiático en los últimos años: Malasia trasladó su capital administrativa a Putrajaya en 2003 y Birmania estableció en 2006 su capital en Naipyidó.