Represión rusa

Golpe a las libertades en Rusia con el cierre de la oenegé Memorial, emblema de la sociedad civil

La decisión de la justicia rusa pone el colofón a un año de feroz cerco a la oposición

El Tribunal Supremo ruso liquida la organización Memorial, crítica con Putin

El Tribunal Supremo ruso liquida la organización Memorial, crítica con Putin. En la foto, un seguidor de Memorial sostiene una pancarta en la que puede leerse "Somos Memorial", en el exterior del tribunal. /

El Periódico

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La merma paulatina de libertades en la Rusia de Vládimir Putin ha dado un paso de gigante. La Corte Suprema rusa ha ordenado el martes el cierre de la oenegé Memorial, las más emblemática en lo que a defensa de libertades se refiere. La justicia ha argumentado que la organización infringe una ley que exige a los grupos registrarse como agentes extranjeros. Los abogados de Memorial nunca han tenido duda de que se trata de una demanda auspiciada por motivos políticos.

La prohibición supone el colofón a un año de medidas enérgicas contra los movimientos de la oposición y los grupos defensores de derechos, en el que también se ha encarcelado al principal crítico del Kremlin, Alexei Navalny, se ha prohibido su movimiento político y muchos de sus aliados han huido del país.

La versión oficial de Moscú pasa por afirmar que simplemente está aplicando las leyes para frustrar el extremismo y proteger al país de la influencia extranjera. Un abogado de Memorial ya ha asegurado que apelará la sentencia, tanto en Rusia como en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.

Memorial, creada en 1989 por disidentes soviéticos (entre ellos el premio Nobel de la Paz Andréi Sájarov), comenzó una labor meticulosa de documentación de los crímenes estalinistas y de los campos del Gulag, y prosiguió su labor en la defensa de los derechos humanos y de los prisioneros políticos.

Esta oenegé también investigó los abusos rusos durante las guerras en Chechenia y, más recientemente, sobre los paramilitares del grupo Wagner, considerado como el brazo armado de Rusia en el extranjero, extremo negado por el Kremlin. En 2009, Natalia Estemirova, responsable de la oenegé en la región del Cáucaso, fue asesinada. El crimen nunca fue resuelto.

De la era estalinista a Putin

Las autoridades incluyeron al grupo en una lista oficial de "agentes extranjeros" en 2015, lo que supuso numerosas restricciones a sus actividades. El mes pasado, los fiscales acusaron al Centro de Derechos Humanos Memorial, con sede en Moscú, y a Memorial International, su estructura matriz, de violar la ley de agentes extranjeros, y pidieron al tribunal que los clausurara.

Los fiscales han dicho, en particular, que Memorial International infringió la normativa al no marcar todas sus publicaciones, incluidas las de las redes sociales, con la etiqueta que exige la ley. También acusaron al centro, con sede en Moscú, de hacer apología del terrorismo y el extremismo.

"Desacreditar a las autoridades rusas"

En la audiencia final del martes, un fiscal del Estado dijo que Memorial había organizado campañas mediáticas a gran escala destinadas a desacreditar a las autoridades rusas, según la agencia de noticias TASS. El grupo ha negado haber cometido ninguna infracción grave y ha calificado los juicios de decisión política. Ha dicho que sus miembros continuarán su trabajo incluso si se disuelve.

Putin también dijo este mes que Memorial había defendido a organizaciones que Rusia consideraba extremistas y terroristas, y que su lista de víctimas de la represión política había incluido a colaboradores nazis.

Gran parte del trabajo de Memorial se ha centrado en las represiones llevadas a cabo por los cuerpos de seguridad del Estado soviético, incluido el KGB, donde Putin sirvió como espía en el extranjero.

"Es una decisión nefasta, injusta", reaccionó la abogada de la defensa, Maria Eismont. "Cerrar Memorial International devuelve a Rusia a su pasado y aumenta el peligro de (nuevas) represiones", estimó poco antes ante el tribunal.

Creciente autoritarismo del Kremlin

Defensora del Estado de derecho en Rusia frente al retorno del totalitarismo, la oenegé ha sido muy crítica con las crecientes tendencias autoritarias en el Kremlin, especialmente desde que el presidente ruso, Vladímir Putin, regresara al Kremlin en 2012.

La organización ha criticado en especial la ley que restringe la libertad de manifestación, la que limitaba las adopciones internacionales o la que perseguía la propaganda homosexual. También ha cuestionado el papel ruso en la guerra en Ucrania, lo que le ha valido algunos ataques vandálicos por parte de los ultranacionalistas.

Las críticas sobre la situación en Chechenia costaron la vida al director de su filial en Grozni, Elena Estemírova, que fue asesinada en 2009, crimen del que muchos acusan directamente al líder checheno, Ramzán Kadírov.

Memorial se ha enfrentado a las autoridades rusas, tanto en los tribunales locales como en el Tribunal Europeo de Derechos Humanos para prevenir la repatriación forzosa de emigrantes a Asia Central, donde serían muy probablemente encarcelados o torturados.

Detenidos dos colaboradores de Navalni

Dos colaboradores del opositor encarcelado Alexéi Navalni han sido arrestado, uno de ellos acusado de extremismo, delito castigado con 12 años de prisión.

"Ha ocurrido una gran desgracia", escribió en Twitter Léonid Volkov, opositor exiliado y brazo derecho de Navalni, anunciando la detención de Ksenia Fadeeva, diputada municipal de Tomsk, y de Zakhar Sarapulov, antiguo responsable de la oficina del grupo en Irkutsk.

Fadeeva fue elegida en septiembre de 2020 para el Parlamento de Tomsk, ciudad siberiana donde Alexéi Navalni fue envenenado en agosto de ese mismo año, en plena campaña electoral.

Trasladado a Alemania para recibir tratamiento, el opositor, que acusa al Kremlin de envenenamiento con una sustancia neurotóxica, fue arrestado a su regreso a Rusia a principios de 2021 y está en prisión desde entonces.