Tensión en el Reino Unido

Johnson intenta recuperar el control de su partido en plena expansión de la pandemia

El primer ministro británico pasa por el peor momento de su segundo mandato con parte de su propia formación política en su contra

El Reino Unido bate el récord de contagios en un día desde que se desató la crisis del covid-19 debido a la nueva variante ómicron

reino unido boris johnson

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Begoña Arce

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Vapuleado, desobedecido, presionado, Boris Johnson trata de recuperar el control de su Partido y las riendas en la dirección contra la pandemia. El castigo que un centenar de diputados conservadores le infligió el martes votando contra el certificado covid cuestiona su autoridad para gobernar el país, cuando el coronavirus golpea de nuevo. “El peor primer ministro en el peor momento”, le lanzó el líder laborista Keir Starmer en una agitada sesión de control cara a cara en la Cámara de los Comunes, horas después del motín de los Tory.

Sin credibilidad

Starmer recordó que el Plan B de medidas para frenar la variante ómicron sólo pudo salir adelante “gracias al liderazgo del Partido Laborista, que el primer ministro no tiene”. “Los suyos han perdido la confianza en él. Sus propios diputados están hartos, no le van a defender, no van a venir a respaldarle y si les propone medidas sanitarias básicas, no las van a votar”.

El líder laborista aludió al escándalo de las fiestas en Downing Street el pasado invierno, de las que Johnson trata de zafarse. “Durante semanas ha clamado que no se habían saltado las normas. Dice que no supo lo que estaba pasando en su propia casa en Navidad. Yo no le creo. Sus diputados no le creen y los británicos tampoco. Ha tomado al público por tonto y se ha convertido en alguien peligroso”. Entre gritos Johnson respondió, “nosotros vacunamos, ellos vacilan”.

Récord de contagios

El primer ministro garantizó que consultará con el Parlamento si durante el periodo de vacaciones navideñas debe imponer nuevas restricciones, algo que podría suceder en cualquier momento. El Reino Unido registró el miércoles 78.610 contagios de coronavirus, la cifra más alta en un día desde que comenzó la pandemia. El asesor médico del Gobierno, Chris Whitty, advirtió que se batirán nuevos récords en las próximas semanas. Los casos de ómicron pasaron de 4.671 a 10.017 en un día. La variante ya alcanza el 60% de contagios en Londres. Los sanitarios creen que en Navidad la mayoría de los hospitalizados con el virus serán de la nueva mutación.

Debido al agravamiento y a la necesidad también de mostrar al país que sigue al mando, Johnson compareció junto a Whitty y la doctora Nikki Kanani, directora médica de cuidados primarios en la sanidad pública, (NHS) de Inglaterra. En sus respuestas insistió en que la gente se vacune lo antes posible con la tercera dosis y esquivó comentarios sobre la revuelta de la noche anterior o la pérdida de confianza de los ciudadanos.

Canapés y dimisión

 El 'Daily Mirror' ha publicado la foto de una fiesta navideña ilegal con canapés, copas y gorritos de papel en la sede del partido Conservador el 14 de diciembre del año pasado. Uno de los asistentes, Shaun Bailey, ha dimitido como presidente del Comité de Policía y Delincuencia de la Asamblea de Londres.

La cuestión es si el plante de los diputados conservadores, que ha sido interpretado como un voto de censura contra Johnson y el aviso de que su liderazgo peligra, le detendrá a la hora de tomar más restricciones legales frente a ómicron.