Cumbre de Roma

Macron anuncia una desescalada del conflicto pesquero y Johnson le desmiente

Los líderes aprovechan el G-20 para mantener una reunión que no estaba prevista

El Reino Unido exige a Francia que retire su amenaza de prohibir las descargas de los pesqueros británicos a partir del martes

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el primer ministro británico, Boris Jonhson, en un acto al margen del G-20 de Roma, en la Fontana de Trevi.

El presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el primer ministro británico, Boris Jonhson, en un acto al margen del G-20 de Roma, en la Fontana de Trevi. / Reuters / Guglielmo Mangiapane

Rosa María Sánchez
Irene Savio
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El presidente de Francia, Emmanuel Macron, y el primer ministro de Reino Unido, Boris Johnson, improvisaron este domingo un encuentro cara a cara, al margen de las reuniones del G-20, con el fin de buscar una salida al grave conflicto pesquero que amenaza a ambos países. No obstante, la reunión solo sirvió para reforzar las discrepancias, a pesar del tono conciliador que quiso mostrar Francia en un primer momento.

Nada más terminar el encuentro, fuentes de la presidencia francesa expresaron que ambos mandatarios habían acordado este domingo iniciar un proceso de “desescalada” del conflicto en torno a la disputa pesquera. Según la versión francesa, Johnson y Macron decidieron trabajar "en medidas prácticas y operativas" en "los próximos días" para favorecer este proceso de rebaja de la tensión entre los dos países. Y añadieron que las medidas serán adoptadas “lo más rápido posible” para evitar “un aumento de la tensión”, precisando que el próximo martes se hará un balance para decidir si París sigue adelante, o no, con las represalias contra Londres.

Poco después llegó la versión del Reino Unido contradiciendo el tono conciliador de Francia. "Si el Gobierno francés quiere presentar propuestas para reducir las amenazas que ha hecho, las recibiríamos con satisfacción. Nuestra posición no ha cambiado", dijo el portavoz del primer ministro Boris Johnson a los periodistas en la cumbre del G-20 en Roma.