La OMS admite que empleados suyos cometieron abusos sexuales en RDC

Más de 80 trabajadores humanitarios, algunos de ellos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), estuvieron involucrados en casos de abusos y explotación sexual durante la crisis del ébola en la República Democrática del Congo, según un informe de una comisión independiente. El trabajo confirma la investigación periodística llevada a cabo el año pasado por la 'Fundación Thomson Reuters' y 'The New Humanitarian'. Un total de 50 mujeres acusaron a trabajadores de diferentes organizaciones de exigir sexo a cambio de puestos de trabajo entre 2018-2020.

La comisión ha hallado que 21 de los 83 presuntos implicados eran empleados de la OMS, y que los abusos, que incluyen nueve denuncias de violación, fueron cometidos por personal nacional e internacional. "A las presuntas víctimas se les prometieron trabajos a cambio de relaciones sexuales o para mantener sus empleos", ha afirmado el miembro de la comisión Malick Coulibaly en una conferencia de prensa. Muchos de los agresores masculinos se negaron a usar condón y 29 de las mujeres quedaron embarazadas. Algunas fueron obligadas a abortar más tarde por sus propios violadores, ha agregado.

El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, que busca un segundo mandato en el organismo de salud de las Naciones Unidas, ha calificado el informe de "desgarrador" y a las agresiones de sus empleados de "traición repugnante" y "actos imperdonables". También ha pedido disculpas a las víctimas. "Lo que te pasó a ti nunca debería pasarle a nadie. Es imperdonable. Mi principal prioridad es asegurarme de que los culpables rindan cuentas", ha dicho. El director regional de la OMS, Matshidiso Moeti, por su lado, se ha mostrado "conmovido, horrorizado y desconsolado".

Cargos superiores

Una niña de 14 años llamada "Jolianne", explicó a los investigadores de la comisión como un conductor de la OMS le ofreció llevarla a casa, pero en realidad la condujo a un hotel donde la violó. La adolescente quedó embarazada y dio a luz. Algunas de las víctimas que eran empleadas de la organización testificaron a la comisión que sufrieron acoso y agresiones sexuales por hombres con cargos superiores que las obligaron a tener relaciones sexuales a cambio de mantener el puesto de trabajo o subir de categoría y aumentar el salario. Algunas dijeron que fueron despedidas por negarse a tener relaciones sexuales. Otras, que a pesar de ceder ante los agresores, no consiguieron los trabajos.

Las presuntas víctimas "no recibieron el apoyo y la asistencia necesarios para vivir experiencias tan degradantes", asegura el informe, que critica y responsabiliza a la dirección de la OMS de lo ocurrido.

En junio del año pasado, el gobierno del Congo anunció el fin del brote de ébola que duró dos años y que mató a más de 2.200 personas. El segundo brote más grande de esta enfermedad desde que se identificó el virus en 1976.