Argentina supera ya los 100.000 muertos por covid

Argentina ya tiene más de 100.000 muertos por covid-19. Un total 100.250 casos fatales, desde que comenzó el confinamiento, a fines de marzo de 2020. De esta manera, se ha convertido en el país décimo segundo a nivel global en cantidad de decesos por millón de habitantes.

Durante los primeros meses del confinamiento, Argentina había controlado la expansión del virus. La tolerancia social al encierro fue menguando con el correr de las semanas. Por otra parte, la oposición de derechas decidió impugnar la estrategia sanitaria y llamó a desobedecer a la "infectadura" o, el también llamado de manera despectiva "Gobierno de los científicos". La debacle económica prexistente tampoco ayudó a respetar las restricciones. Más de un 40% de pobres y un porcentaje similar de personas en situación de informalidad laboral, y que salían a trabajar de lo que podían, no generaban las condiciones para controlar la proliferación del covid-19.

El Gobierno del presidente Alberto Fernández debió enfrentar la pandemia en una situación de adversidad inicial. Su antecesor, Mauricio Macri, había convertido al ministerio de Salud en una simple secretaría. La llegada del virus obligó a reconstruir a pasos acelerados el sistema hospitalario. De acuerdo con especialistas, se logró controlar la curva de contagios hasta setiembre. A partir de ese momento comenzó a tener un ascenso diario.

Se pasó del Aislamiento Social Preventivo Obligatorio al Distanciamiento Social Preventivo Obligatorio. La flexibilización no dio los resultados esperados y en marzo pasado se tuvieron que volver a tomar medidas de restricción. Por varias semanas se corrió el riesgo de que colapsaran las unidades de cuidados intensivos.

Un total de 20,9 millones de personas ha sido una dosis de las vacunas contra el covid-19, un 45% de la población. Casi 5,2 millones se han inmunizado en dos oportunidades. Se han adquirido vacunas de AstraZeneca, la rusa Sputnik V, Sinopharm, CanSino y Moderna. A la vez, laboratorios locales participan de la producción o envasado de AstraZeneca y Sputnik V. El objetivo de las autoridades es inmunizar en breve a los jóvenes.

Los contagios han comenzado a disminuir, así como la ocupación de camas de terapia intensiva y las muertes. La cifra de 100.000 casos fatales tiene no obstante un fuerte impacto simbólico y no será ajena a la disputa electoral de fin de año, cuando debe renovarse parte del Congreso.