Desfile militar

Putin advierte en el aniversario de la victoria sobre los nazis que su país defenderá sus intereses "de forma firme"

El líder del Kremlin acusa a sus rivales geopolíticos de Occidente de reavivar las ideologías de exclusión mediante la "rusofobia"

Conmemoración del Día de la Victoria en San Petersburgo

Militares rusos en el desfile del Día de la Victoria, que conmemora el 76º aniversario del triunfo sobre los nazis en la Segunda Guerra Mundial. /

Marc Marginedas

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Nuevo Día de la Victoria, festividad anual en la que Rusia conmemora el triunfo sobre la Alemania nazi; nuevas advertencias de Vladímir Putin a Estados Unidos y la Unión Europea, a quienes acusa de forma velada de reavivar las ideologías excluyentes y las ideas de "superioridad nacional" del siglo pasado mediante la "rusofobia". Minutos antes de que más de 12.000 militares, casi 200 tanques y vehículos blindados y ocho decenas de aviones y helicópteros desfilaran por los negros adoquines y sobrevolaran los cielos cubiertos de nubes de la plaza Roja, el líder del Kremlin ha prevenido a sus rivales geopolíticos de que el Estado ruso defenderá "de forma firme" sus "intereses nacionales" y proveerá "la seguridad" de su "pueblo".

En un discurso de marcado tono militarista, como viene siendo habitual en los últimos años en esta fecha tan señalada en el calendario local, el presidente Putin ha sacado pecho de la potencia del Ejército ruso, al que ha atribuido la función de garante de la soberanía de su país frente a un Occidente al que percibe como agresivo. "La garantía de todo esto es el valor de las Fuerzas Armadas de Rusia, herederas de los soldados de la Victoria", ha subrayado. Además, Putin ha arremetido de nuevo contra lo que denominó intentos de "reescribir" la historia, en un momento en que instituciones como el Parlamento Europeo han condenado por igual los crímenes cometidos por los regímenes totalitarios nazi y comunista, antes y durante la contienda mundial, a los que responsabilizó de asesinatos en masa, deportaciones y genocidio.

Tensión con Occidente en aumento

La tensión de los últimos años entre Rusia, por un lado, y EEUU y la UE por otro no cesa de aumentar. Recientemente, el despliegue de un impresionante dispositivo militar en las proximidades de la frontera con Ucrania ha tenido al mundo en vilo durante semanas, ante la posibilidad de que el Kremlin se lanzara a una nueva aventura bélica en el país vecino. En la parada militar, fueron mostrados, entre otros ingenios militares, bombarderos estratégicos Tupolev Tu-160, cazas de combate Sujói Su-35S, misiles balísticos ultrasónicos Kinzhal adheridos a cazas MiG-31K, además de columnas mecanizadas de tanques y vehículos blindados.

Al igual que el año pasado, cuando los festejos se vieron muy deslucidos por la pandemia de covid-19, en esta ocasión también han sido cancelados todos los conciertos populares y actos multitudinarios, incluyendo la denominada 'Marcha del Regimiento Inmortal', un evento en el que las autoridades invitan a los ciudadanos a desfilar tras la parada militar portando retratos de familiares y antecesores que hayan participado en la contienda mundial. Pese a ello, decenas de miles de ciudadanos se concentraron en el centro de Moscú portando medallas, banderas, y vestidos muchos de ellos con uniformes militares.

Galina Yakunina, de 36 años, ataviada con una boina y una guerrera militar, aguarda turno para depositar claveles rojos en la Tumba del Soldado Desconocido, monumento conmemoratorio situado junto a las murallas del Kremlin. Abogada de profesión, no oculta su admiración por el presidente Putin, e incluso desearía la vuelta de una figura "como Stalin". "El país progresó", enumera, como razón. Asegura no creer en las acusaciones de millones de ciudadanos perecieron víctimas de la represión durante su mandato: "mis abuelos trabajaban en el metro y nunca vieron represión".