La policía de Nueva York cancela el polémico uso de perros-robot

La Policía de Nueva York ha decidido renunciar al uso de perros-robot para a vigilar ciertas zonas de la ciudad después de la polémica que ha despertado esta tecnología de vigilancia de la ciudadanía.

Tras las solicitudes judiciales presentadas por el concejal neoyorquino Ben Kallos y el portavoz del Concejo de Nueva York, Corey Johnson, para conocer los detalles del funcionamiento del aparato electrónico, oficiales de la policía afirmaron que el contrato firmado con el fabricante, Boston Dynamics, había sido cancelado el pasado 22 de abril, según apuntó el New York Times.

El subcomisario del departamento de inteligencia y antiterrorismo de la policía de Nueva York, John Miller, confirmó al medio que el contrato se había anulado y que el perro robótico, apodado 'Digidog', había sido devuelto a Boston Dynamics, o que sería devuelto pronto. La policía cambió sus planes de despliegue de esa tecnología de vigilancia tras generar preocupación por su potencial impacto negativo, especialmente sobre las comunidades afroamericanas.

Militarización distópica de la policía

Aunque la policía vendió el perro-robot como una herramienta para "proteger a la gente" y "salvar vidas", recibió muchas críticas desde su primera misión el pasado mes de febrero, cuando fue utilizado en el barrio del Bronx en respuesta a un allanamiento de morada, y las opiniones negativas se incrementaron después de ser visto cumpliendo labores de vigilancia en un complejo de viviendas sociales en Manhattan.

El concejal Kallos opinó que el perro subraya la "militarización de la policía", y señaló que se parecía a los canes robóticos que aparecen en el episodio "Metalhead" de la serie de televisión distópica 'Black Mirror'. "En un momento en el que deberíamos tener más policías en las calles, desarrollando relaciones con los residentes, ellos van en otra dirección intentando reemplazarlos con robots", agregó.

Bill Neidhardt, portavoz del alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, dijo que estaba "contento" de que "Digidog haya sido sacrificado". "Es extraño, alienante y envía el mensaje erróneo a los neoyorquinos", añadió.

Abusos policiales

La llegada de los perros robóticos a Nueva York se produjo en un momento en el que las prácticas y las políticas de las fuerzas de seguridad de EEUU estaba siendo analizadas de cerca como resultado de las muertes de varios ciudadanos afroamericanos a manos de policías, entre los que destacó el fallecimiento de George Floyd en Minneápolis, que desembocó en manifestaciones contra el racismo en todo el mundo.

Según el portavoz de Boston Dynamic Michael Perry, de los 500 perros robóticos que están desplegados por todo el mundo, sólo 4 de ellos están siendo utilizados por departamentos de policía. Además, señaló que los dispositivos "no están diseñados para ser utilizados como armas, ni para dañar ni intimidar a personas o animales".