"Años de plomo"

Francia detiene a siete exmiembros de las Brigadas Rojas

Sobre cuatro de los antiguos brigadistas de extrema izquierda detenidos pesan condenas a cadena perpetua en Italia

"El Gobierno expresa su satisfacción por la decisión de Francia de comenzar los procedimientos judiciales, pedidos por Italia, contra responsables de gravísimos crímenes de terrorismo, que han dejado una herida aún más abierta”, se felicitó el primer ministro italiano, Mario Draghi

El MInistro del Interior francés Gerald Darmanin (delante) y el Ministro de Jusiticia Eric Dupond-Moretti (detrás).

El MInistro del Interior francés Gerald Darmanin (delante) y el Ministro de Jusiticia Eric Dupond-Moretti (detrás). / Efe

Irene Casado Sánchez

Irene Casado Sánchez

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Siete italianos, exmiembros del grupo de ultraizquierda Brigadas Rojas condenados en Italia por actos de terrorismo cometidos en los años setenta y ochenta, fueron detenidos este miércoles en Francia a petición de las autoridades italianas. Otros tres se encuentran actualmente “a la fuga”.   

“No es posible huir de tus propias responsabilidades, del dolor que has causado, del daño que has provocado”, se felicitó el ministro italiano de Asuntos Exteriores, Luigi Di Maio, tras conocer la noticia. El pasado 8 de abril, su compañera de filas, la responsable de la cartera de Justicia, Marta Cartabia, pidió oficialmente a su homólogo galo, Eric Dupond-Moretti, que no “permitiese que los atentados de las Brigadas Rojas quedasen impunes”. 

“Doctrina Mitterrand” 

La petición italiana incluía una lista de 200 personas, pero “los importantes trabajos preparatorios bilaterales [...] condujeron a retener los crímenes más graves”, señalan desde la presidencia, así “las 10 solicitudes transmitidas al Tribunal de Apelación de París se inscriben estrictamente en el marco de la ‘doctrina Mitterrand’, ya que se trata de crímenes de sangre”, señala el Elíseo en un comunicado. Dicha doctrina, decretada en 1985 por François Mitterrand, entonces presidente, permitía a los exactivistas italianos refugiarse en el país siempre y cuando renunciasen a las acciones violentas y no tuviesen antecedentes de delitos de sangre. 

Tras años de tensiones diplomáticas por la negativa gala de detener y extraditar a los antiguos brigadistas, Francia ha atendido con diligencia la última petición del país vecino. “El presidente ha querido zanjar este asunto, como Italia lleva años pidiendo -indica un comunicado del Elíseo-. Francia, también afectada por el terrorismo, entiende la absoluta necesidad de justicia de las víctimas”. La respuesta a la solicitud italiana se inscribiría además en la “necesidad imperiosa de construir una Europa de la Justicia, donde la confianza mutua debe estar en el centro”. 

“Una página de su historia manchada de sangre y lágrimas” 

Enzo Calvitti, Giovanni Alimonti, Roberta Cappelli, Marina Petrella y Sergio Tornaghi, pertenecientes a las Brigadas Rojas; y Giorgio Pietrostefani y Narciso Manenti, de los Núcleos Armados, son los siete detenidos. Todos ellos serán presentados ante la fiscalía general del Tribunal de Apelación en las próximas 48 horas, antes de que un juez se pronuncie sobre su detención provisional mientras se examina la petición de extradición

Sobre cuatro de los antiguos activistas italianos de extrema izquierda pesan condenas a cadena perpetua tras ser declarados culpables de asesinato, el resto cuentan con penas que van desde los 18 a los 11 años de reclusión. "Espero que [su detención] permita a Italia pasar una página de su historia manchada de sangre y lágrimas", comentó Dupond-Moretti a la salida del Consejo de Ministros de este miércoles, en referencia al periodo entre 1969 y 1985 conocido como los "Años de plomo"

El propio primer ministro italiano, Mario Draghi, considerado por Emmanuel Macron como un socio predilecto en su defensa de Europa, aplaudió la operación policial: “El Gobierno expresa su satisfacción por la decisión de Francia de comenzar los procedimientos judiciales, pedidos por Italia, contra responsables de gravísimos crímenes de terrorismo, que han dejado una herida aún más abierta”. 

Indignación y traición 

Entre los aplausos, aparece la irritación de los abogados de los detenidos. "Estoy indignada y no tengo palabras para describir esta operación que es similar a una mini-redada", lamentó la letrada Irene Terrel, al cargo de la defensa de cinco de los detenidos. 

Terrel habla incluso de “traición”: “Fue Francia quien les dio asilo, las autoridades, tanto de derechas como de izquierdas, y no François Mitterrand […] Desde los años 80, estas personas han estado bajo la protección de Francia, han rehecho su vida aquí durante treinta años, están instalados a la vista de todos, con sus hijos, sus nietos... y, de madrugada, vinieron a buscarlos, cuarenta años después de los hechos...", dijo, decidida a contestar los procedimientos de extradición.