El futuro de Europa

La Eurocámara cierra la etapa del Brexit con la ratificación del acuerdo comercial

El pleno aprueba la ratificación del tratado comercial que entró en vigor provisionalmente el pasado 1 de enero

El exnegociador europeo, Michel Barnier, recuerda que el divorcio es una advertencia y un fracaso del que hay que extraer lecciones

La Eurocámara cierra otro capítulo del Brexit al ratificar el acuerdo con el Reino Unido

La Eurocámara cierra otro capítulo del Brexit al ratificar el acuerdo con el Reino Unido. En la foto, Michel Barnier, en el Parlamento Europeo en Bruselas. /

Silvia Martinez

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No es ningún “cheque en blanco”. La Unión Europea seguirá velando porque el Reino Unido cumpla, aplique y respete tanto el acuerdo de retirada del Reino Unido, cuyo Protocolo sobre Irlanda e Irlanda del norte sigue generando tensiones y un procedimiento de infracción contra Londres, como el nuevo acuerdo comercial que entró en vigor de forma provisional el pasado 1 de enero. Pero con la ratificación del tratado comercial –aprobado este miércoles por 660 votos a favor, 5 en contra y 32 abstenciones- el Parlamento Europeo pasa página a un proceso de negociación agónico y que se ha prolongado casi un lustro.

“Es un divorcio, una advertencia y un fracaso. Un fracaso de la Unión Europea del que tenemos que extraer lecciones como hombres y mujeres políticos aquí en el Parlamento Europeo, en el Consejo, en la Comisión y en todas las capitales. ¿Por qué el 52% de los británicos votaron en contra?. Hay razones para esa cólera social y tensión que existía en el Reino Unido pero también en muchas regiones de Europa. Nuestro deber es escuchar los sentimientos de la gente. No hay que confundir indignación social con populismo. Hay que hacer todo lo posible para responder en todos los Estados miembros”, reivindicaba el incansable negociador europeo, Michel Barnier, recibido con una ovación, e invitado estrella al último debate plenario, que ha marcado el punto final a una etapa que ha desencadenado el primer divorcio de la historia europea.

El hecho de que el acuerdo entre la UE y el Reino Unido se materializara en vísperas de Nochebuena impidió a la Eurocámara pronunciarse a tiempo sobre el acuerdo. Finalmente, y pese a los reiterados desafíos e incumplimientos del Gobierno británico en la aplicación del protocolo los eurodiputados han optado por completar el procedimiento de ratificación. “Sé que hay reticencias en distintas partes de esta Cámara sobre si es correcto ratificar este acuerdo cuando existen una serie de compromisos que no se están respetando. Comparto las preocupaciones por las acciones unilaterales del Reino Unido desde que el acuerdo empezó a aplicarse de forma provisional”, admitió el miércoles la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, durante un debate de más de cuatro horas.

Aviso a Londres

Pero precisamente por eso, sostiene la alemana, es “tan importante” dotarse de las herramientas adecuadas para asegurar el “pleno y fiel cumplimiento de las obligaciones que ambas partes han acordado”. Algo que también servirá para encontrar “soluciones pragmáticas” sobre el protocolo de Irlanda que en las últimas semanas ha registrado progresos . “En los últimos días y semanas hemos visto una dinámica constructiva y seguiremos trabajando estrechamente con el Reino Unido”, dijo subrayando que se necesitan “soluciones y no palabras” pero que no dudarán en utilizar los instrumentos previstos en el pacto para hacer cumplir el acuerdo.

Prácticamente todos los grandes grupos de la Eurocámara han cerrado filas con un acuerdo que consideran positivo aunque hubieran preferido una relación más estrecha y con menos fricciones. “Con el Brexit todo el mundo sale perdiendo”, ha recordado el jefe de filas de los conservadores, Manfred Weber. “El Brexit representa la gran mentira de la derecha británica”, ha criticado por su parte la presidenta de los socialdemócratas, Iratxe García, que aún así ha tendido la mano a Londres para desarrollar una relación constructiva. “No es un cheque en blanco al Reino Unido. Hay que reconstruir la confianza”, ha advertido el liberal Malik Azmani sobre un socio que genera mucha desconfianza, especialmente por la actitud del primer ministro, Boris Johnson, y el comportamiento del Gobierno británico.