Crisis sanitaria global

Dimite el ministro de Sanidad de Austria, "agotado" por la gestión de la pandemia

Rudolf Anschober, de 60 años, ha sido hospitalizado dos veces en poco tiempo por agotamiento

El ministro de Salud de Austria, Rudolf Anschober, anuncia su dimisión.

El ministro de Salud de Austria, Rudolf Anschober, anuncia su dimisión. / JOE KLAMAR

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El ministro de Sanidad de Austria, Rudolf Anschober, ha anunciado este martes su dimisión por razones de salud después de haber sido hospitalizado en dos ocasiones recientemente por problemas circulatorios vinculados al agotamiento y el estrés que le ha ocasionado la gestión de la pandemia.

"Me he dado cuenta de que tengo que poner el freno de emergencia para mí mismo", ha afirmado el político verde durante la rueda de prensa en la que ha hecho el anuncio, en alusión al término por el que suelen conocerse a las medidas excepcionales para hacer frente a la pandemia de covid.

Anschober, de 60 años, ha ostentado la cartera de Sanidad desde el arranque del Gobierno de coalición entre el Partido Popular Austriaco (OeVP) del canciller, Sebastian Kurz, y Los Verdes en enero de 2020. Durante este tiempo, ha logrado ser uno de los políticos más populares de Austria, superando incluso a Kurz en los sondeos.

Amenazas de muerte

"Uno de mis puntos fuertes es que mantengo la calma en situaciones de crisis", explicó en una ocasión. Sin embargo, también ha recibido críticas por la gestión de la pandemia, en los últimos meses por los problemas relativos a la campaña de vacunación y los fallos de comunicación. A ello se ha sumado un "incremento masivo de la agresividad" en parte de la población, con "amenazas de muerte" contra su persona y sus allegados.

El médico Wolfgang Mückstein, de 44 años, asumirá a partir del próximo lunes la cartera de Sanidad. En sus primeras declaraciones, llamó a todos los ciudadanos a vacunarse para acabar con la pandemia.

Actualmente, Viena y otras regiones del este del país se encuentran confinadas hasta el 1 de mayo debido al colapso de los hospitales. Según Anschober, más de un tercio de los austriacos no se someten a los test y la misma proporción dice no estar dispuesto a vacunarse.