Crisis sanitaria

La Corte Suprema de Israel prohíbe el rastreo de los móviles de contagiados de covid

El alto tribunal considera que esta práctica supone una grave infracción de las libertades civiles

Palestinos esperan ser vacunados en Jerusalén.

Palestinos esperan ser vacunados en Jerusalén. / ATEF SAFADI

REUTERS

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La Corte Suprema de Israel ha prohibido al Gobierno el uso generalizado del rastreo de teléfonos móviles de los portadores de coronavirus, tras calificar la medida como una grave infracción de las libertades civiles.

Utilizada de forma intermitente desde marzo de 2020 en un esfuerzo por frenar la pandemia, la tecnología de vigilancia de la agencia antiterrorista Shin Bet comparó las ubicaciones de los operadores con otros teléfonos móviles cercanos para determinar con quién entraron en contacto.

Desde el principio, los grupos de derechos civiles habían planteado desafíos judiciales por cuestiones de privacidad, mientras que los legisladores arrojaban dudas sobre la eficacia de la herramienta de rastreo de contactos.

En su fallo, el tribunal dijo que temía que el rastreo de teléfonos móviles, impuesto como medida temporal de emergencia, se estuviera volviendo permanente poco a poco. Le dio al Gobierno hasta el 14 de marzo para poner fin al uso indiscriminado de la vigilancia y limitarla a los portadores confirmados de coronavirus que se niegan al interrogatorio epidemiológico.

"Cambiar el rumbo"

"Esperamos que este fallo lleve al Gobierno y al Knesset (Parlamento) a hacer una pausa y cambiar el rumbo de esta pendiente resbaladiza del uso de medios extremos y antidemocráticos en la lucha contra la epidemia", dijo la Asociación por los Derechos Civiles en Israel.

"Creo que esto es un crimen contra la salud de los ciudadanos israelís", dijo el viceministro de Salud Yoav Kisch en Twitter después del veredicto de la Corte Suprema.

La tecnología de rastreo de teléfonos Shin Bet se conocía anteriormente principalmente como un medio para rastrear a militantes palestinos buscados. Israel ha informado hasta ahora de 778.172 casos de coronavirus y 5.758 muertes.

Con una tercera ola de infecciones que alcanzó su punto máximo en enero, el contagio ha estado disminuyendo en las últimas semanas, ya que las autoridades han administrado al menos una de las dos dosis de vacuna covid a más de la mitad de la población del país de 9 millones.