Difusión de conspiraciones violentas

Twitter suspende temporalmente la cuenta de una congresista ultra

La red social congela 12 horas la cuenta de Marjorie Taylor Green por difundir bulos sobre fraude electoral en Georgia

Apoyada por Trump, es conocida por propagar teorías de la conspiración antisemitas y sobre el 11-S

cabdidato republicana al congreso promootora de qanon en eeuu marjorie taylor

cabdidato republicana al congreso promootora de qanon en eeuu marjorie taylor / periodico

Carles Planas Bou

Carles Planas Bou

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Tras acordar la suspensión permanente de la cuenta del presidente Donald Trump, Twitter sigue tratando de contener la propagación de bulos sobre las elecciones en Estados Unidos. Este domingo, la red social ha suspendido durante 12 horas la cuenta de la congresista ultraderechista Marjorie Taylor Green por seguir difundiendo conspiraciones sobre un inexistente fraude electoral en Georgia.

La congresista, apoyada por un Trump que la considera una “estrella emergente”, es conocida por abrazar postulados radicales, racistas y antisemitas. El pasado 4 de noviembre se convirtió así en la primera congresista electa que cree en QAnon, una delirante teoría de la conspiración que cree que Trump libra una guerra secreta contra los demócratas y Hollywood, que operan como secta pedófila y satánica alimentándose de la sangre de niños.

Impulsada por Trump

Excéntrica y llamativa como Trump, Green ha aparecido en anuncios cargando un fusil y amenazando con utilizarlo contra los grupos antifascistas y recientemente ha sido criticada porque, durante el asalto ultraderechista del Capitolio, se negó a ponerse la mascarilla cuando estaba con otros congresistas.

Green, que también ha difundido conspiraciones sobre los atentados del 11-S, ha pedido a sus seguidores “movilizarse pacíficamente en oposición” a la inauguración presidencial de Joe Biden.

La decisión temporal de Twitter, que ha tomado en otras ocasiones por propagación de odio o mensajes que puedan incitar a la violencia, mantiene abierto el debate sobre el poder regulador de las redes sociales y sobre la amenaza de la radicalización ultraderechista en EEUU.