Tensión en EEUU

Los demócratas inician el 'impeachment' contra Trump por "incitación a la insurrección"

El partido de Nancy Pelosi busca inhabilitar de por vida al republicano para impedir que vuelva a ejercer cargos públicos

Los plazos impiden destituir al presidente saliente antes del 20 de enero, cuando tomará posesión Joe Biden

Grandes empresas anuncian que dejarán de donar fondos a los republicanos que se negaron a certificar la victoria del demócrata

El Partido Demócrata inicia formalmente el 'impeachment' contra Trump

El Partido Demócrata inicia formalmente el 'impeachment' contra Trump. /

Ricardo Mir de Francia

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El segundo 'impeachment' contra Donald Trump empieza a tomar forma. La mayoría demócrata en la Cámara de Representantes ha presentado formalmente este lunes los cargos que se imputarán al presidente por su responsabilidad en los acontecimientos que derivaron en el asalto al Capitolio de cientos de sus seguidores, un ataque contra la sede de la soberanía popular estadounidense en el que murieron cinco personas. Este segundo 'impeachment' incluye un solo cargo, "incitación a la insurrección", una acusación que los demócratas esperan que se vote esta misma semana, probablemente el miércoles, para poner oficialmente en marcha el proceso. Ningún otro presidente en la historia se ha enfrentado a dos procesos de destitución en el Congreso.

El llamado artículo del 'impeachment' acusa al todavía presidente "incitar intencionadamente a la insurrección" con la arenga que dirigió aquella misma mañana a sus seguidores o su incesante campaña para presentar como un fraude su derrota electoral. En aquel discurso, en el que pidió a sus seguidores que marcharan hasta el Capitolio, llegó a decirles: "Tenéis que demostrar fuerza" o "si no lucháis a muerte, dejaréis de tener un país". El documento también menciona las presiones de Trump a los responsables electorales de Georgia, a los que pidió que le encontraran casi 12.000 votos para revertir el resultado de las presidenciales de noviembre.

"El presidente Trump puso gravemente en peligro la seguridad de Estados Unidos y sus instituciones de Gobierno", afirma el pliego de la acusación, donde se añade además que "amenazó la integridad del sistema democrático", "interfirió con la transición pacífica del poder" y "traicionó la confianza en la presidencia". No hay tiempo material para que el republicano sea apartado de la presidencia antes de que concluya su mandato el 20 de enero. Una vez que la Cámara de Representantes apruebe el cargo, el proceso se trasladará al Senado. Es allí donde se celebrará el juicio político, pero no podrá comenzar antes del 19 de enero por cuestiones de calendario.

Con la vista en 2024

El objetivo de los demócratas no radica, por lo tanto, en forzar su destitución, sino en demostrar que su conducta no puede quedar impune y tratar de conseguir que sea inhabilitado de por vida para ejercer cargos públicos. Eso serviría para impedir que Trump vuelva a presentarse a las elecciones en 2024, como se ha sugerido desde su entorno. "A medida que pasan los días, se intensifican los horrores del asalto en curso a la democracia perpetrado por este presidente, de modo que es urgente que actuemos", dijo horas antes la presidenta demócrata de la Cámara baja, Nancy Pelosi. Su partido parece tener ya los 218 votos necesarios para imputar a Trump y poner en marcha el proceso.

Durante la jornada, los demócratas presentaron además una moción para pedir al vicepresidente, Mike Pence, que invoque la enmienda 25 para apartar inmediatamente a Trump del poder por incapacidad para ejercer sus funciones. Una suerte de ultimátum antes de proceder con el 'impeachment', que no se votará hasta el martes debido a las objeciones presentadas por los republicanos. Para que la enmienda fructifique, tendría que ser respaldada por más de la mitad de los miembros del Gabinete, una posibilidad bastante improbable dada la lealtad que muchos mantienen hacia el presidente. Dos de sus ministras han dimitido desde el ataque al Capitolio del miércoles.

No acaban ahí los problemas de Trump porque el fiscal general de Washington D.C., Karl Racine, ha afirmado que podría presentar cargos contra el presidente por incitar a la violencia en las horas previas al asalto al Capitolio. "Está claro que se animó a la multitud", ha declarado Racine.

Partido dividido

Trump ya fue juzgado en el Capitolio a finales del año pasado. Por entonces, se le acusó de abuso de poder y obstrucción al Congreso por sus presiones al Gobierno de Ucrania para que abriese una causa judicial contra Joe Biden por los negocios de su hijo Hunter en el país. El republicano fue absuelto en febrero de 2020, gracias al apoyo casi unánime de su partido, la misma suerte que corrieron Andrew Johnson (1868) y Bill Clinton (1998), los únicos presidentes que se han enfrentado a un 'impeachment'. Richard Nixon dimitió poco después de que se iniciara el proceso.

Esta vez se espera a un Partido Republicano mucho más dividido que aquel otro que cerró filas hace un año para salvar el pellejo a su líder. Las presiones llegan desde todos los flancos. Grandes empresas como Marriot, Facebook o la seguradora Blue Cross Blue Shield han anunciado que dejaran de aportar donaciones al centenar largo de congresistas republicanos que la semana pasada se negaron a certificar la victoria electoral de Biden.