Cárcel para los diez hongkoneses fugitivos que huían hacia Taiwán

Los diez fugitivos hongkoneses apresados en el mar cuando huían a Taiwán han sido condenados esta mañana a penas que oscilan entre los siete meses y los tres años de cárcel por un tribunal del interior. Los dos acusados restantes, menores de edad, han sido ya devueltos a la excolonia. El grupo, conocido como “Los doce de Hong Hong” y de edades comprendidas entre los 16 y los 33 años, fue interceptado el pasado 23 de agosto por la Guarda Costera de la provincia de Cantón cuando su lancha motora estaba a apenas 26 millas náuticas de la costa de salida. Su plan consistía en buscar refugio en Taiwán, cuyo Gobierno ha prometido acoger a los acusados de delitos durante las revueltas violentas que el pasado año azotaron a la capital financiera.  

Ocho de los acusados han sido sentenciados por cruzar ilegalmente la frontera a siete meses de cárcel y multas de 10.000 yuanes (1.246 euros), ha informado el tribunal de Yantian. Los otros dos, Tang Kai-yin y Quinn Moon, han sido condenados por organizar la operación. Al primero se le ha impuesto una pena de tres años y una multa de 20.000 yuanes (2.492 euros), mientras la segunda ha sido sentenciada a dos años y 15.000 yuanes (1.869 euros). El fallo justifica la categoría de cabecillas por “el alto número personas involucradas” y acusa al grupo de violar las leyes fronterizas en un momento de “circunstancias serias”.  

El tribunal no ha dictado los castigos más altos que le permitía la ley. Para el delito de salida ilegal de la frontera se prevén penas de hasta un año de cárcel. Los organizadores se arriesgan a siete años y cadena perpetua si lideran mafias u organizaciones criminales. En la sentencia influyó la asunción de culpa del grupo en bloque. “La decisión ha sido tomada teniendo en consideración las circunstancias, consecuencias, arrepentimiento de los acusados y las recomendaciones de la Fiscalía”, aclara la sentencia. El tribunal también informó a media mañana de que había decidido no acusar a los dos menores y poco después ya habían abandonado la China continental. 

Disturbios violentos

El proceso ha sido descrito como abierto por las autoridades pero varios familiares, diplomáticos y periodistas extranjeros han visto su paso cerrado a las instalaciones. Los diez tienen un horizonte judicial complicado en la excolonia por su participación en los disturbios violentos del pasado año. Entre los ocupantes de la lancha estaba el activista antigubernamental Andy Li, que esperaba juicio por el delito de colusión con fuerzas extranjeras que recoge la nueva Ley de Seguridad. 

Los huidos fueron trasladados a Shenzhen tras ser apresados en las aguas y ni las autoridades hongkonesas ni sus familiares fueron informados hasta varios días después. Estos aseguran que los detenidos quedaron aislados del mundo exterior y se les negó tanto la medicación como los abogados elegidos.  

Son habituales en navidades las sentencias contra los elementos que Pekín considera hostiles. Esta semana ya fue condenada a cuatro años de cárcel la bloguera Zhang Zhan tras haber sido detenida durante los días más duros de la pandemia en Wuhan.