Acuerdo entre Londres y la UE

Trabajo en el extranjero, Erasmus, vacaciones al sol, pasaportes: el brexit complica la vida a los británicos

Los británicos pierden la libertad de establecerse y trabajar en los 27 países de la Unión Europea

Prolongar la estancia en la UE mas allá de 90 días requerirá un visado y pueden perder el derecho al 'roaming' gratis

Una mujer camina por Oxford Street, en Londres.

Una mujer camina por Oxford Street, en Londres. / NEIL HALL / EFE / EPA

Begoña Arce

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Los británicos no se han topado aún con la realidad del Brexit. Hace tiempo que se desentendieron de este lío mayúsculo, dejándolo aparcado en sus mentes como un runrún de fondo. El virus domina la vida diaria, el miedo a perder la salud, el empleo, la angustia de un futuro que pinta negro. La frase más escuchada cuando el sábado se supo que había acuerdo fue, “al fin esto al menos se ha acabado”. Desgraciadamente empieza ahora.

Visado, sanidad, bneficios sociales

El mismo sábado alguien contaba que un vecino suyo, alemán residente en el Reino Unido desde hacía tiempo, donde ejerce su profesión de médico, había recibido una carta informándole que a partir del 1 de enero no podrá seguir trabajando. La salida de la Unión Europea implica que se acabó el reconocimiento automático de cualificaciones profesionales para médicos, farmacéuticos, dentistas, enfermeros, ingenieros, veterinarios o arquitectos. Es una muy mala noticia para los europeos que trabajan en el Reino Unido, pero es mucho peor aún para los británicos que pierden el derecho automático a ejercer su profesión en 27 países del continente. Ahora deberán pedir la revalidación de sus cualificaciones en cada estado miembro de la UE.

Los británicos no podrán circular libremente por los países de la UE, como venían haciendo. Necesitarán de un visado si quieren pasar en esos países más de 90 días. De instalarse en ellos hará falta establecer una coordinación en materia de sanidad y beneficios sociales, como las pensiones de jubilación, para facilitar el trabajo sin perder derechos y contribuciones preexistentes en el Reino Unido.

La mentira del Erasmus

Una sorpresa especialmente punitiva para los estudiantes es el fin del Erasmus, uno de los programas que más ha potenciado la cohesión de Europa. Boris Johnson había negado en la Cámara de los Comunes explícitamente que el Reino Unido fuera a abandonarlo. “No hay amenaza para el Erasmus y vamos a seguir participando en él”, respondió al diputado del SNP escocés, Douglas Chapman, que se había interesado por la cuestión.  “Los estudiantes del Reino Unido van a continuar disfrutando de los beneficios de los intercambios con nuestros amigos y socios europeos, así como ellos van a poder continuar viniendo a nuestro país”, aseguró el primer ministro. Nada de eso es verdad. Los europeos que deseen pasar el curso académico en el Reino Unido deberán pedir un visado para permanecer legalmente en el país más de tres meses.

Se complican las vacaciones

Viajar también implica nuevas dificultades para los británicos. En el momento de hacer las maletas con destino a la UE, sus pasaportes deberán tener una validez mínima de seis meses hasta su fecha de expiración. La tarjeta sanitaria europea expedida antes de finales del 2020 será válida hasta que expire su fecha. Despuées el Reino Unido va a proporcionar una nueva tarjeta sanitaria global, de la que aún no hay detalles.

Los pasaportes para animales de compañía dejan de ser válidos el 1de enero. Los propietarios de mascotas han de obtener un certificado de vacunas y microchip diez días antes de viajar. El documento sólo será válido por cuatro meses y para un simple viaje.

El 'roaming' gratuito en peligro

Los seguros para comprar una propiedad en un país de la Unión Europea van a ver aumentar y ser más difícil para los británicos obtener una hipoteca. También deberán vigilar el uso del móvil. La prohibición de la UE de cargas de ‘roaming’ finaliza con la salida. De momento los cuatro proveedores de telefonía móvil en el Reino Unido afirman que no tienen planes de reintroducir el ‘roaming’, aunque legalmente pueden hacerlo.  

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