LEY DE SEGURIDAD GLOBAL

Más de 140 detenidos en París en las protestas contra la ley de seguridad de Macron

Se trata del tercer sábado consecutivo marcado por movilizaciones y protestas contra el proyecto de ley que prohibiría la difusión de imágenes de las fuerzas del orden

Los manifestantes lanzan objetos a la policía francesa en la protesta contra la ley de seguridad.

Los manifestantes lanzan objetos a la policía francesa en la protesta contra la ley de seguridad. / CHRISTOPHE ARCHAMBAULT / AFP

Irene Casado Sánchez

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“Stop a las leyes liberticidas, stop a la islamofobia”, bajo estas premisas más de 26.000 personas -según las cifras del Ministerio del Interior- se dieron cita este sábado para protagonizar una nueva jornada de protestas en varias metrópolis francesas. En el centro de las críticas aparecen dos de las iniciativas estrellas de Emmanuel Macron: el proyecto de ley de seguridad global -destinado, entre otras cosas, a proteger la imagen de las fuerzas del orden- y la propuesta legislativa “para reafirmar los principios republicanos” -conocida inicialmente como “proyecto de ley contra el separatismo islamista”. 

Los principales sindicatos y asociaciones responsables de organizar la movilización desaconsejaron a los participantes manifestarse en París, “al considerar que las condiciones de seguridad […] no están aseguradas”. A pesar de la recomendación, unas 10.000 personas, según las cifras de los organizadores, participaron en la cita parisina bajo un importante dispositivo de seguridad. La fuerte presencia policial no impidió que se produjeran varios altercados a lo largo del recorrido, incluyendo la evacuación de la Plaza de la República a base de gases lacrimógenos y cañones de agua. Según el ministro del Interior, 142 personas fueron detenidas en la capital francesa.

Se trata del tercer sábado consecutivo marcado por protestas ciudadanas contra el proyecto de ley de seguridad global, adoptado por la Asamblea Nacional el pasado mes de noviembre. En particular, el rechazo popular concierne al artículo 24 del controvertido texto, que permitiría multar la difusión malintencionada de imágenes de policías y gendarmes durante sus operaciones. Asociaciones de defensa de los derechos humanos y el gremio periodístico denunciaron la ambigüedad de la normativa, considerando que podría atentar contra la libertad de expresión y el derecho a informar. 

La brutalidad policial como trasfondo

La presentación del proyecto legislativo coincidió además con varios casos de violencia policial documentados gracias a imágenes y grabaciones de periodistas o ciudadanos de a pie. En este contexto de exasperación, miles de franceses salieron a las calles el pasado sábado 28 de noviembre, provocando una verdadera crisis social y política. Ante la presión, el Gobierno de Macron prometió la revisión completa del artículo 24, sin evitar con ello nuevas jornadas de protesta.

Lejos de tratarse de la única polémica, este miércoles el primer ministro Jean Castex y sus acólitos desvelaron los detalles del "proyecto de ley para reafirmar los principios republicanos”, cuyo objetivo es reforzar los pilares del laicismo y combatir el fanatismo religioso. El responsable del Gobierno insistió en que “no es un texto contra las religiones, ni contra la religión musulmana en particular”, tratando de calmar los ánimos de quienes consideran la normativa como una embestida contra los musulmanes promoviendo su estigmatización. Este sábado, las protestas pusieron de manifiesto que este texto tampoco cuenta con el beneplácito de todos los franceses.